SOCIEDAD • SUBNOTA
- Norman Briski: “Con doce compañeros del Borda hicimos Gurka!, obra de Zito Lema. Fue el grupo más disciplinado que tuve. Seis dejaron el Borda a partir de esta experiencia. Se integraron en noviazgos. El teatro era un libertario. No sé si dejaban de ser esquizofrénicos o la categoría que les adjudican a los anómalos. Si no tuviese poder adquisitivo estaría caracterizado como uno de ellos. ¡Es tan fácil ponerles título a los pobres! Otra obra que dirigí, Con la cabeza bajo el agua, la hice con uno de ellos: era mi codirector. ¡Dirigía acostado! Gurka! había surgido del relato de uno de ellos que decía que había estado en Malvinas. Pero nunca había estado... la obra está basada en un cuento. Ese chico luego corrió un maratón y nunca llegó a la llegada. Fuimos a ser hinchas suyos, debe haber ido a otro lado... lo seguíamos en su itinerario existencial y siempre teníamos tal grado de novedades... Había otro que hace cuarenta años andaba siempre con un changuito con sus menesteres. Para mí sería el creador de la mochila. Entraba al teatro con una alegría... no conocí otro actor así, siempre están preocupados por la cantidad de gente o por el texto. Junto a mi experiencia del exilio en Perú, la que tuve con el FAB es de las más surrealistas. Cuando no tengo recursos creativos recurro a ellos”.
- José Chatruc: “El partido salió muy bien. Me convocó Sava, papá de Facundo, que fue compañero mío en Racing. El me explicaba lo que buscan con el Frente, esa idea de que no haya más loqueros. Me pareció lindo convivir en algo tan cotidiano. No sabíamos con qué rival nos íbamos a enfrentar. Y vimos gente muy pasional, con mucha noción y sentimiento. Hubo cargadas divertidas. Lo que más me gustó fue el abrazo de todos los chicos. Uno abrazó a otro y le dijo: ‘¡Qué felicidad!’”.
- Héctor Bidonde: “A los doce, quince años del FAB me invitaban a actos y leía poemas escritos por ellos, los tengo guardados. Yo venía siguiendo el movimiento. En un momento descubrimos que los colaboradores del Frente, los psicólogos y artistas, estaban ad honorem, en una situación irregular. La mayoría eran internados, había externados y ambulatorios. Salió la Ley 448 pero no se puso en funcionamiento. Por sugerencia de ellos presenté un proyecto para efectivizar profesionales del FAB y otro para la integración en casas de medio camino y hospitales generales. El expediente y la tramitación siguen porque Alejandro Bodart los tiene con su firma. También presenté un proyecto para el traslado de las unidades 20 y 27 del Borda y del Moyano, eran un foco absurdo y perverso. Destaco su crecimiento como artistas: el otro día en la Legislatura porteña, cuando fueron declarados de interés cultural, mostraron un espectáculo de mimo. Me fui transportado. No persiguen un objetivo terapéutico sino artístico”.
-Vicente Zito Lema: “Conocí el Borda en 1966, buscando a Jacobo Fridman, uno de los mayores poetas y filósofos argentinos. Empecé a trabajar en el hospital buscando unir arte y salud mental. Siguiendo las enseñanzas de Pichon-Rivière fundé un taller de poesía. Armé otros y llegó el exilio. Cuando volví, con mis amigos muertos o desaparecidos, volví al Borda a fundar mi taller. Conocí a Sava. Y ayudé a formar el Frente. Mi taller fue de los primeros en integrarse. Lo paradójico es que el primer lugar donde volví a insertarme tras el desgarro no fue la universidad o los medios... Encontré fuerza ahí, donde pareciera que no hay más que dolor y marginación. Volví a trabajar con el sueño de toda mi vida: el arte es la manera que tienen los seres humanos para desafiar la muerte y la locura”.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux