“Lo que pasó se parece mucho a lo de Cromañón, porque acá falló el poder de policía del Estado y porque hay cierta atmósfera sucia, vinculada al pago de sobornos.” Adrián Rodríguez, el representante legal de la familia de Yésica Emilia Uscamayta Curi, consideró que “otros puntos de relación con Cromañón tienen que ver con que los organizadores hicieron una fiesta que había sido prohibida, desoyendo las advertencias y en colisión con todas las normas administrativas vigentes, generando una trampa mortal para cualquiera de los miles de asistentes” a la quinta San Cayetano.

Sobre cómo fue que se produjo la muerte de Yésica, en la pileta, Rodríguez dijo que todavía no tienen “ninguna versión confiable y es necesario reconstruir muchas partes, motivo por el cual estamos pidiendo a los posibles testigos que se presenten a declarar sin temores, que no- sotros vamos a preservarlos, a mantener sus testimonios en reserva”. Horas después de conocida la muerte de Yésica, hubo testigos no identificados en forma fehaciente que relataron presuntos malos tratos, de “patovicas” que custodiaban el evento, en contra de quienes intentaron socorrer a la víctima para tratar de reanimarla.

Por todo lo expuesto, el abogado de la familia le confirmó a Página/12 que van a solicitar “el cambio de carátula para que los cuatro imputados sean acusados por homicidio con dolo eventual, porque entendemos que la responsabilidad que les corresponde es mayor porque hubo negligencia y desobediencia; no fue un accidente y por eso no puede considerarse que hubo homicidio culposo”. Agregó que “hubo exceso en la venta de alcohol, exceso en la cantidad de personas, ausencia de médicos y de cualquier protocolo de actuación frente a cualquier hecho, como el que ocurrió en la pileta, donde no había guardavidas; todo era muy precario y con absoluta falta de seguridad para los asistentes”.

Adelantó que también van a insistir ante la Justicia “para que se investigue a la Municipalidad de La Plata, porque en la causa hay datos que indican que acá hubo cierta atmósfera sucia vinculada al pago de sobornos y por eso no se hizo nada efectivo para clausurar la quinta y suspender la fiesta de manera efectiva”.

Cristian, uno de los seis hermanos de Yésica, insistió en que están esperando “más personas que se solidaricen y vengan a declarar” sobre lo actuado por la Subsecretaría de Control Urbano, que emitió dos advertencias para que la fiesta no se hiciera (los días 30 y 31 de diciembre), pero a las 4 de la madrugada del 1º de enero “cuando llegó la patrulla municipal a clausurar la quinta, no hicieron nada para evitar que la gente siguiera entrando y para desalojar a los que ya estaban”.

Cristian, que también estuvo en la fiesta, pero no presenció el momento del incidente en la pileta en el que murió su hermana, insistió en que están convencidos de que “acá lisa y llanamente hubo coimas, los funcionarios no cumplieron con su trabajo y por eso pasó lo que pasó. Este lugar no estaba habilitado. Fue mi hermana, pero pudo haber 20, 30 víctimas porque esto pudo haber sido otro Cromañón”.

Tanto Cristian como el abogado de la familia, confirmaron que Yésica “no tenía alcohol en sangre y estaba lúcida”. Era una joven “muy sensata y como no sabía nadar, nunca se arriesgaba”. Es un misterio, por ahora, cómo se produjo la muerte, supuestamente en la parte profunda de la pileta de la quinta San Cayetano.

Juan Uscamayta, el padre de Yésica, le confirmó a este diario que han recibido “muchas versiones” sobre cómo sucedió el hecho que se investiga. En los medios de prensa platense se han registrado declaraciones de personas que aseguran haber visto a un “patovica” golpeando a un joven que intentó hacerle maniobras de recuperación a Yésica.

Una joven que envió un audio que se conoció a través de las redes sociales, habló también del joven que intentó reanimarla y que fue echado por los patovicas, en lo que parecía un intento de evitar que el hecho generara la reacción de las miles de personas presentes. “Son versiones que nosotros estamos tratando de confirmar y por eso pedimos, por favor, a los posibles testigos presenciales que se presenten a declarar”, le dijeron a este diario el padre y el hermano de Yésica.

La joven estaba cursando el último año de la carrera de Periodismo en la Universidad de La Plata y uno de sus grandes orgullos era el de haber entrevistado al presidente de Bolivia, Evo Morales. Sus padres, Juan Uscamayta y Eugenia Curi, nacieron en Bolivia, él en La Paz y ella en Sucre. La familia está afincada en Argentina desde hace 40 años y el matrimonio tuvo siete hijos nacidos en Argentina, incluyendo a Yésica.

“Ella era una chica muy activa, muy consciente, que estaba siempre participando en actividades estudiantiles, en causas sociales junto a los pueblos originarios o dando clases de apoyo en escuelas primarias. Ella me empujaba a la actividad política, pero yo nunca fui tan militante como lo era ella”, señaló Cristian, de 32 años.