A siete años del asesinato del comunero Javier Chocobar, integrantes de las comunidades diaguitas marcharon a los tribunales de Tucumán para pedir el inicio del juicio oral contra el empresario Darío Amín y dos ex policías, reclamo que Amnistía Internacional y la Asociación de Abogados del Noroeste en Derechos Humanos (Andhes) llevaron ante las Naciones Unidas.

“Hoy marchamos porque los asesinos de mi papá están libres y a él no lo tenemos más por defender nuestros derechos sobre la tierra”, dijo Audolio Chocobar, de 31 años, uno de los seis hijos del comunero, quien marchó junto a su comunidad.

La marcha fue encabezada por Delfín Gerónimo, de Unión Diaguita; y Andrés Mamaní, cacique de la comunidad indígena Los Chuschagasta, quien sufrió heridas graves aquel mismo 12 de octubre.

Además, recibió el acompañamiento de los integrantes de la Andhes, que junto a Amnistía Internacional denunció el caso de Chocobar ante las Naciones Unidas para que exhorte al Estado argentino a que se castigue a los responsables del crimen, que aún no fueron juzgados.