Familiares de víctimas de la tragedia de Cromañón realizaron un escrache anoche frente a la casa que habita desde su liberación Raúl Villarreal, señalado como mano derecha de Omar Chabán. El ex jefe de seguridad del local de Once proyecta viajar a Río Negro para trabajar.
Los familiares se concentraron en el barrio de Constitución, frente a un edificio ubicado en Solís 2085, donde se colocó un vallado en el frente que también abarca una casa vecina. Varios efectivos de la Guardia Cuerpo de Infantería de la Policía Federal custodian el lugar.
Los familiares fueron hasta allí y exigieron justicia. También gritaron contra Chabán, Villarreal y Aníbal Ibarra.
La madre de Romina Branzini, esposa del manager del grupo Callejeros, señaló: “Mis tiempos no son los mismos que los de la Justicia, ahora Villarreal puede irse a otra provincia a trabajar, mientras que nuestros hijos no pueden trabajar porque están muertos por culpa de Villarreal y Chabán”.