ENTREVISTA AL SECRETARIO DE AGRICULTURA, MIGUEL CAMPOS
“Las retenciones fueron un instrumento esencial”
A siete meses de haber asumido, el secretario de Agricultura, Miguel Campos, realiza un balance de su gestión. Defiende las retenciones.
Por Ana Lía Milanesio
En los siete meses de gestión al frente de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Campos hizo foco en revitalizar las economías regionales sin descuidar las relaciones comerciales con el exterior, en especial, la conquista de nuevos mercados internacionales. Se enfrentó con los grandes frigoríficos por el nuevo régimen de distribución de la Cuota Hilton y apostó fuerte por recuperar el precio de la leche tras la caída de la rentabilidad del sector. Ahora, junto a los técnicos de la Secretaría preparan una demanda que presentarán ante la Organización Mundial de Comercio, contra los Estados Unidos y los países europeos que aplicaron subsidios agrícolas en detrimento de las economías de las terceras naciones.
En esta entrevista con Cash Miguel Campos advierte que la producción lechera fue la más castigada por la crisis desde 1999, pero que durante el 2003 el sector empezó a recuperarse. “El precio de la leche para el productor aumentó después de la crisis, principalmente por la falta del producto. Pero eso nos permite pensar en estrategias a futuro. Tal como el armado de la Mesa de Lechería donde actualmente trabajamos dos temas particulares: el precio y las estrategias de exportación a largo plazo.”
¿Existe alguna medida puntual que aliente al productor agropecuario a continuar apostando a la lechería y evitar el éxodo al cultivo de la soja?
–Es claro que tenemos que generar los instrumentos para mejorar la situación relativa de diferentes productos, especialmente los regionales, frente a la realidad de la soja. Pero sin pensar en castigarla. Ese es uno de los objetivos de mi gestión. Por las características del negocio agropecuario no es correcto analizar su rentabilidad y resultados en períodos anuales sino por ciclos más largos (5 años, por ejemplo) y siempre una combinación de actividades es más inteligente y seguro que una sola opción por más buena que sea a priori. Un instrumento es la generación de líneas de crédito en condiciones ventajosas que apunten a estos conceptos.
¿Qué otra alternativa estratégica están generando?
–La reactivación de la Oficina de Riesgo Agropecuario (ORA) que tiene como principal objetivo brindar asesoramiento al sector productivo, tanto en lo climático, en lo económico, como en la relación riesgo-precio, va en esa dirección. En lo climático brindamos al productor un informe sobre la perspectiva anual de las microrregiones para que tome una decisión acertada sobre el cultivo al que orientar la producción. En lo económico asesoramos sobre la combinación de actividades que arrojan mejor renta y menor variabilidad de renta. Y por último, para acotar el riesgo precio analizamos las cotizaciones de los diferentes cultivos para que el productor sepa dónde calzarse en el mercado de futuros.
¿Comparte la idea de que las retenciones al agro son impuestos distorsivos?
–Las retenciones fueron un instrumento esencial para la reconversión de la Argentina. El ministro de Economía, Roberto Lavagna, planteó que en la medida que mejoremos los ingresos fiscales vamos a trabajar en un cronograma de reducción de retenciones.
¿Por qué se postergó el acuerdo sobre los nuevos criterios en la distribución de la Cuota Hilton?
–En el nuevo criterio de reparto hay perdedores y esos perdedores están en contra del nuevo sistema de distribución. Estamos planteando un criterio diferente orientado a la regionalización, o sea a la federalización de la Cuota Hilton. Pero, concretamente, hemos volcado un mayor compromiso con las provincias que tienen capacidad de producir la Cuota Hilton, pero que hoy no tienen las inversiones en plantas frigoríficas. Queremos dotar de un peso importante a la regionalidad, no sólo teniendo en cuenta el número de cabezas de ganado de cada región sino la cantidad de frigoríficos ponderándolo de una manera equitativa, en pos de la capacidad de transformación. Necesitamos que la Cuota sea una herramienta más dentro de una política ganadera nacional que incremente de forma sostenida nuestras exportaciones, tanto de cortes Hilton como no Hilton.
¿Existen en la Argentina controles suficientes para evitar el contagio de la “enfermedad de la vaca loca”?
–Nuestro país es libre de enfermedades transmisibles espongiformes. Se trabaja en prevención desde 1995. La Argentina fue uno de los primeros países que prohibió el uso de harinas de carnes y hueso para la alimentación animal. Contamos con la ventaja de tener un sistema de alimentación del ganado pastoril donde el uso del racionamiento es temporal y orientado al consumo de cereales y granos como la soja y el maíz. Junto con Brasil somos los países más seguros para evitar el contagio de la enfermedad de la vaca loca. Pero creo que la gran ventaja que tiene nuestro país, para diferenciarse, es que la carne proviene de un sistema diferenciado de producción pastoril. Es ahí donde hay posibilidades de crecer y posicionarnos en el mercado externo.