Dom 10.02.2008
cash

RETROCESO DE LAS COMPAÑIAS ESTADOUNIDENSES Y CRECIMIENTO DE LAS HISPANAS

La conquista española

Desde comienzos de la década del ’90, el capital español desplazó al de Estados Unidos como dominante en la región. Pasaron a controlar sectores clave de la economía.

› Por Diego Rubinzal

La relación entre América latina y España sufrió un fuerte vuelco a partir de la década del noventa. Hasta entonces, los estrechos lazos idiomáticos, políticos y culturales no se correspondían con la escasa vinculación económica. A partir de esos años, las empresas de ese país adquirieron un rol regional relevante. En el período 1993-2002, el mercado latinoamericano recibió inversiones españolas por 75.000 millones de euros. Ese monto representó el 41 por ciento de los capitales de ese origen que buscaron mercados en el exterior.

Las seis sociedades que más desarrollo tuvieron en América latina (Santander, BBVA, Repsol-YPF, Endesa, Telefónica e Iberdrola) proporcionaron elevadas ganancias a sus accionistas: 13.600 millones de euros entre julio de 1990 y junio de 2001, de acuerdo con el relevamiento realizado por la consultora Stern Stewart & Co.

En la Argentina, las políticas aperturistas y privatizadoras ejecutadas por el menemismo transformaron al país en uno de los principales destinos del capital español. Según cálculos conservadores, el stock de esas inversiones superó los 40.000 millones de dólares. Repsol, Telefónica, BBVA, Santander, Endesa, Aguas de Barcelona, Mapfre, Acesa e Iberia son algunas de las compañías que lideraron ese desembarco. Así, esas firmas lograron dominar una porción significativa de servicios clave: telefónico, aéreo, eléctrico, de agua corriente, petróleo y financiero.

En el último relevamiento de inversiones en nuevas plantas productivas realizadas en 2006, compiladas por el Centro de Estudios de la Producción, se detalla que “con un total de 4454 millones de dólares, se destacan las inversiones originarias de países miembro de la Unión Europea. En especial, los capitales españoles representaron el 21 por ciento del total de las inversiones productivas relevadas en 2006, seguidos por los de origen británico e italiano, con participaciones del 6 y 5 por ciento, respectivamente”.

En el caso de las inversiones destinadas a fusiones y/o adquisiciones de empresas, el informe sostiene que “las inversiones estadounidenses mantuvieron una posición determinante y, con más de 2500 millones de dólares, explicaron el 33 por ciento del total en 2006. Las compras realizadas por firmas originarias de la Unión Europea representaron el 7 por ciento. Se destacan en importancia España, Gran Bretaña y Luxemburgo”. Es decir que, más allá del liderazgo estadounidense y de la reciente irrupción de importantes inversiones de origen brasileño, los capitales españoles continúan teniendo una presencia significativa en la región.

Según la cámara que agrupa a las casi 700 empresas españolas radicadas en la Argentina, sus afiliados aportan un 15 por ciento de la recaudación impositiva y generan 200.000 puestos de trabajo. El informe elaborado por Jorge Schvarzer, director del Cespa-UBA, Inversiones españolas en la Argentina. Una relación nueva, estrecha y sugerente, sostiene que, en general, las filiales de empresas de Estados Unidos radicadas en la Argentina no facturan más del 0,5 por ciento de las ventas totales de la matriz. En cambio, “la filial típica de las empresas españolas oscila entre un máximo de casi la mitad de la venta total (Repsol) hasta valores de 6 a 10 por ciento en la venta global. Es decir que las filiales locales son muchos más importantes para las españolas que para las estadounidenses, relación que marca una dependencia mayor entre ellas que en los casos clásicos”, concluye.

Otra característica de la inversión española reside en los estrechos lazos que ligan entre sí a las casas matrices. Esa relación se verifica “en las tenencias cruzadas de acciones y el flujo continuo de directivos entre ellas coordinados en general (pero no exclusivamente) por los grandes bancos de esa nación. Esos lazos le otorgan una presencia económica, social y política significativa, como grupo, y que se refleja, entre otras variables, en el interés que exhibe su gobierno en sus actividades, no sólo en la Argentina sino también en los diversos países de América latina donde han hecho pie”, concluye Schvarzer. En este sentido, la venta parcial del capital accionario de Repsol pareciera una cuestión puntual y no un cambio de tendencia.

[email protected]

(Versión para móviles / versión de escritorio)

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS rss
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux