La intención de disminuir la utilización del dólar en el comercio bilateral para aplicar las operaciones con sus respectivas monedas está creciendo en el vínculo de empresas argentinas y brasileñas. La experiencia del Sistema de Pagos en Monedas Locales (SML), que pretende ser emulada en el corto plazo por varios países de la región, cobró renovados bríos con la crisis internacional y la recesión en las principales economías del mundo. El sector privado entonces tiene la oportunidad de eludir la divisa estadounidense y su volatilidad, además de generar un ahorro transaccional. En los primeros ocho meses de funcionamiento el esquema facilitó un intercambio por 177,4 millones de pesos, en tanto la cantidad de empresas ascendió a 184, en su mayoría pymes, según el relevamiento hasta mayo del Banco Central.

El sistema fue puesto en marcha el 3 de octubre pasado y permite comerciar entre exportadores e importadores argentinos y brasileños utilizando sus respectivas monedas. Puede ser utilizado en cualquier operación de plazo menor a 360 días. Para realizar el cambio de las respectivas monedas existen 22 bancos argentinos y 21 brasileños habilitados. El mes pasado se incorporó el Banco Nación. Así la cantidad de entidades homologadas representa el 80 por ciento del sistema financiero local.

De acuerdo con el informe de junio, al que accedió Cash y será difundido esta semana, entre octubre de 2008 y mayo de este año se cursaron 281 operaciones por 177,4 millones de pesos. Un 53 por ciento fue por montos inferiores a los 100.000 pesos y un 36 por ciento por volúmenes de entre 100.000 y 500.000 pesos, por lo que se infiere que las pequeñas y medianas empresas son las que aprovechan este mecanismo. Esto se explica porque las grandes obtienen los dólares muchas veces desde sus casas matrices sin costo alguno. “El sistema enfrenta un conocido factor cultural: los brasileños suelen pensar en reales; los argentinos, en cambio, piensan en dólares”, explican en el Central.

Se registraron transacciones incluso por cifras inferiores a los 10.000 pesos, algo que fue leído por los técnicos de la autoridad monetaria como una señal de que muchas compañías testean el funcionamiento del SML con compraventa pequeñas. Sólo diez operaciones fueron realizadas hasta el momento por encima de los 5 millones de pesos. El ahorro en los costos de transacción tanto financieros como administrativos generado por este sistema se estima en un 3 por ciento del total de la operación. Esta reducción de costos se repite de un lado y del otro de la frontera, al evitar el paso a dólares de lo que paga el comprador y lo que cobra el vendedor en sus respectivas plazas cambiarias. “El porcentaje de ahorro se acrecienta cuanto menor es el monto de la operación”, indica el informe oficial.

En total accedieron durante los ocho meses 184 empresas, 90 argentinas y 94 brasileñas. Entre las locales, 54 de ellas (el 60 por ciento) lo hicieron en más de una oportunidad, cursando dos o más operaciones a través del sistema de pagos. Tan sólo el mes pasado se sumaron 69 nuevas transacciones comerciales sin la utilización del dólar. Una distinción por sectores muestra una diversificación “muy elevada”. El SML fue utilizado por metalúrgicas, autopartistas, textiles, alimentarias y cosméticas. También el sector energético se incorporó: desde abril las importaciones de energía de la Compañías Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) se hace mediante el SML.