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La expropiación del paquete accionario de Repsol en YPF fue ratificada por amplia mayoría en la Cámara de Senadores, lo que evidencia la casi unanimidad sobre el desmanejo de la firma española en relación con los objetivos nacionales en materia energética. La recuperación del control estatal en la compañía despierta nuevas discusiones en relación con la política de precios y el esquema de producción en el corto plazo, la actividad exploratoria, los recursos no convencionales, la búsqueda de rentabilidad y el vínculo con el entramado industrial. Cash dialogó con tres especialistas en la materia que abordan desde diferentes ópticas la siguiente compleja problemática: ¿Qué hacer con YPF?

Diego Mansilla, economista especialista en energía, enfatiza que existe una amplia gama de acciones que YPF debe comenzar a realizar para modificar situaciones de abastecimiento de nafta súper, precios finales sobredimensionados y problemas con las garrafas, entre otros. Además, destacó que la nueva YPF es “sólo una herramienta” de política energética, que debe complementarse con nueva regulación sobre el mercado.

Héctor Valle, presidente de la Fundación de Investigaciones para el Desarrollo (FIDE), resalta que YPF debe volver a ser impulsora de la industria metalúrgica y que debe integrarse con la petroquímica.

Roberto Kozulj, director de la Escuela de Economía, Administración y Turismo de la Universidad Nacional de Río Negro, advirtió que difícilmente se produzcan importantes hallazgos petrolíferos, aunque indicó que sí se podría aumentar la explotación de gas en Loma la Lata. Puso el énfasis en la explotación de los yacimientos no convencionales.