La Administración Federal de Ingresos Públicos estableció un nuevo mecanismo que obliga a las sociedades cotizantes en Bolsa a informar en tiempo real su constitución accionaria, los movimientos dentro de su directorio y aportes y distribución de beneficios. La medida se enmarca dentro de la respuesta del Gobierno a las irregularidades que muestran algunas grandes empresas al determinar e informar el monto que giran como utilidades al exterior, generando así tensiones en el mercado cambiario. El registro que plantea el ente recaudador va más allá de la actual coyuntura, buscando una mayor transparencia del mercado en beneficio del pequeño inversor.

La crisis financiera internacional dejó en evidencia innumerables fallas en el funcionamiento de los mercados. Junto con la deficiente regulación de los gobiernos de países avanzados y su connivencia en los negocios con los conglomerados, se exhiben serias irregularidades en el manejo dentro de las empresas cotizantes. Las principales son la insuficiencia de directores independientes en la administración, una mediocre difusión de información clave, ineficacia en la gestión del riesgo, excesivas bonificaciones a directivos, un marco regulatorio desactualizado y falta de independencia en la auditoría y en la calificación del riesgo.

En momentos de inestabilidad global como el actual, la posibilidad que tiene el inversor de contar con esa información financiera por parte de las empresas cotizantes constituye entonces un elemento esencial para facilitar la dinámica del mercado. También lo es la rapidez con que se obtenga ese tipo de información. Por su parte, para el Gobierno constituye una herramienta vital para adecuar los mecanismos tendientes a estabilizar el posible efecto que tenga el cambio de rumbo de una empresa considerada estratégica en la actividad económica.

Hasta ahora tanto las sociedades comerciales como los fideicomisos locales informaban las modificaciones en sus estructuras operacionales y de negocios una vez al año, al cierre del ejercicio. El nuevo mecanismo que dispuso la AFIP permitirá actualizar online la composición accionaria de las sociedades y la nómina de autoridades, representantes y órganos de control de las sociedades. El sistema incluye la constitución y las operaciones de fideicomisos locales y del exterior y las cuotas de cooperativas y mutuales. “También se amplía el régimen de información anual para incluir a los fideicomisos extranjeros”, anticiparon desde el ente recaudador.

Las sociedades que no cotizan en Bolsa deberán informar online todas las transferencias de acciones y participaciones societarias. En tanto, aquellas que cotizan la registración se realizará únicamente en la porción del capital que posee el control societario a través de la toma de decisiones. En ambos casos los sujetos obligados a informar abarcan a vendedores, compradores, escribanos públicos participantes y la misma sociedad. Por su parte, a través de la firma de un convenio con la AFIP, podrán consultar este tipo de operaciones los registros de cada provincia, la Inspección General de Justicia, el Banco Central y la Comisión Nacional de Valores

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