AGRO › VUELVEN LOS SUBSIDIOS Y TRABAS DE LA UNIóN EUROPEA
› Por Susana Díaz
La lucha por el libre comercio que llevan adelante los países centrales continúa abriendo nuevos frentes de batalla. El gran combatiente fue la Unión Europea. Por un lado anunció el restablecimiento de los subsidios a sus exportaciones de trigo. Por otro, estableció barreras paraarancelarias a las importaciones de cítricos argentinos.
El escenario del debate volvió a instalarse en Ginebra, Suiza, donde esta semana se desarrollaron negociaciones en el marco del Comité de Agricultura de la OMC. El grupo Cairns, integrado por la Argentina y otros 16 países, entre ellos los restantes miembros del Mercosur, Australia, Canadá y Sudáfrica, rechazaron enérgicamente la decisión de la UE de volver a subsidiar sus ventas de trigo. En un comunicado titulado Subsidios de la Unión Europea: Un paso atrás, el Cairns dijo estar “extremadamente decepcionado”. Los subsidios, señalaron, son la forma más perniciosa de apoyo a la agricultura e impactan directamente sobre los ingresos de los agricultores de los restantes países exportadores. La “restitución” a las ventas externas se suma así a los subsidios que ya existían a la producción. En el terreno discursivo la UE, junto a Estados Unidos, se encuentra a la cabeza de los países que abogan por el libre comercio. Visto desde la perspectiva psicológica, el discurso representa un claro cuadro de esquizofrenia.
El Cairns recordó que “en años recientes nos hemos complacido de la reforma de la Política Agrícola Común europea y de su reconocimiento de la necesidad de eliminar los subsidios a la exportación”. Por eso demandaron a la UE “que se valga de la oportunidad que brindan las negociaciones de la Ronda de Doha, para liberar al resto del mundo de la carga que representan sus programas de ayuda interna y de subsidios a la exportación”. “El peso de estas políticas –destacaron– recae sobre los agricultores de aquellos países, que no pueden permitirse entrar en una guerra de subsidios, particularmente, los países en desarrollo”.
El segundo capítulo fue el avance sobre otra de las restricciones comerciales clásicas que aplican los países centrales: el establecimiento de barreras de entrada con la excusa de problemas de carácter sanitario. Luego de endurecer en abril de 2004 los requisitos de entrada para los cítricos, en notable coincidencia con el aumento de las exportaciones argentinas, esta semana la Comisión Europea (CE), con sede en Bruselas, advirtió que los sistemas de control argentinos “no son seguros” y “no garantizan” que los cítricos locales estén libres de plagas, como el chancro o la mosca.
En 2004 Argentina exportó cítricos por 560 mil toneladas y 225 millones de dólares, un aumento de 14 por ciento en el volumen y del 25 por ciento en divisas en relación al año anterior. A Europa se destinaron unas 300 mil toneladas, cerca del 54 por ciento de las ventas totales, volumen que convirtió al país en el primer abastecedor detrás de España.
Las advertencias de la CE fueron rápidamente respondidas por la Secretaría de Agricultura, para quien los controles del Senasa ofrecen una “seguridad adecuada” al sistema de certificación de la UE y las normas de la FAO. Destacó además que el sistema de trazabilidad o seguimiento en todas las fases de la cadena alimentaria “asegura el origen de la fruta” exportada y reduce al mínimo la posibilidad de que se mezcle con partidas de otro origen o de un lugar no autorizado.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux