DESECONOMíAS
Economistas de chatarra
› Por Julio Nudler
Los economistas no sólo ingieren comida chatarra: también la analizan a su manera, como ha hecho Amnon Levy, de la Universidad de Wollogong. Sus hallazgos están expuestos en un extenso escrito al que tituló “Una teoría del consumo vitalicio racional de comida chatarra”, suponiendo como punto de partida que esa clase de alimento suele ser más sabroso y barato que el nutrimento sano. Pero ésas son ventajas de corto plazo, ya que la comida basura arruina la salud y acorta la vida en el largo plazo. De aquí que sea dable observar en gente poco previsora que su consumo de comida chatarra sufra fuertes oscilaciones: cuando están sanos se enferman comiéndola; entonces la suspenden hasta recuperar la salud, logrado lo cual vuelven a engullirla. Pero esta conducta pendular puede superarse mediante un enfoque racional de largo plazo. Para mostrarlo, Levy se vale de Mr. Sweetooth, empedernido tragabasura que un día debió consultar a su médico porque sufría de fatiga crónica. El doctor le ordenó una dieta sana, gracias a la cual desaparecieron los síntomas. Pero un año después, el señor Sweetooth fue al siquiatra porque sufría de depresión permanente sin ser argentino. Así fue como descubrió que la causa estaba en la privación de su amada comida chatarra. Esto le planteó una difícil elección entre su salud física y su cordura. Pasó otro año, y un Sweetooth obeso y fatigado se dirigió a LTR Consulting, donde lo atendió el doctor Dynamoptimus, economista especializado en aplicar métodos de optimización dinámica a problemas de salud y estilo de vida. Este experto concluyó que en lugar de atiborrarse de comida basura durante un tiempo y luego apartarse absolutamente de ella, para después reiniciar el péndulo, su cliente debía seguir un sendero intermedio que maximizase la utilidad a lo largo de su vida, sujeto a la marcha de su salud y el efecto de la edad sobre su esperanza de vida. Dicho sendero balancearía la satisfacción marginal de comer porquerías con el deterioro marginal de la salud. Para más datos, tomar hora con el doctor Dynamoptimus, que ahora mismo está deglutiendo un BigMac.