EL MERCADO INTERNO
Es un tema que debería ser más explicado, más reflexionado en y con las organizaciones sociales de los barrios, especialmente en los barrios pobres. Y esa explicación para poder construir un pensamiento crítico debería ser sencilla. No basta, creo, con luchar por aumentos de salarios y por una mejor distribución del ingreso. Es necesario, para la comprensión cabal de este concepto, llegar con los conocimientos básicos a la inmensa mayoría de nuestra población, elevar aún más la capacidad de comprensión, crear una saludable conciencia autónoma, base de una participación masiva en la defensa del mercado interno. Profesores, investigadores, docentes, estudiantes, dirigentes sociales, que entienden esta problemática, son una masa crítica con la que se cuenta. “Los neoliberales son perversos” (Miguel Peirano, secretario de Industria, Cash 6/3/05): el discurso neoliberal sostiene con su poder económico, cultural y mediático que lo fundamental es el mercado externo, la exportación de nuestros productos primarios. Están diciendo que toda la capacidad productiva nuestra debe estar al servicio de abastecer a ese sector de poderosos que tienen un alto consumo que yo lo llamaría depredador. De esa manera también influyen decisivamente en qué tenemos que producir, cuánto debemos producir, quién lo tiene que producir, cuál es el costo, el precio a que se debe producir, y quiénes lo deben producir para que ellos lo consuman. Por otro lado los empresarios sostienen que cuanto menos paguen salarios, cuanto menos paguen las herramientas y maquinarias, cuanto menos paguen la materia prima, más van a ganar ellos, más ganancias tendrán sus empresas y así podrán sobrevivir. Un país pobre con empresarios ricos. Por eso, para que el engaño no abarque a toda nuestra sociedad, es que es necesario llevar esta discusión a los barrios. Evitar nuevas frustraciones. Crear una conciencia crítica lo suficientemente fuerte y profunda para evitar ser confundidos con esos discursos. Entonces sí podremos encarar un programa de desarrollo sustentable del mercado interno, que responda a las exigencias de la globalización.

Naum Poliszuk
Talleres Universitarios barriales
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Vicente LOpez
En el año 1988 se realizaron en Vicente López las “Jornadas de Recuperación de la Costa de Vicente López”. Tenían por objeto estudiar y definir objetivos para el proyecto de costa que todos anhelábamos, y se realizaron con la participación de centros y colegios profesionales, entidades intermedias, organizaciones sociales, profesionales y vecinos. Este consenso de la comunidad que fue reafirmado por Ordenanza 8256 señala entre otras cosas: “Todos aquellos predios yacentes desde la línea de ribera al agua son, por añadidura, del dominio público y por consiguiente inalienables, otorgando facultades indiscutibles a la población de decidir sobre el destino de este sector destacándose la importancia de la toma de decisiones jurídicas con la finalidad de avalar y consolidar las aspiraciones del vecino de Vicente López”.
Es el Código Civil el que determina que son bienes del dominio público del Estado los mares, ríos, playas, las riberas internas de los ríos, las calles, plazas, caminos etc. Cabe señalar entonces que se pretende emplazar el megacomplejo sobre tierras del dominio público del Estado, ya que se ubican entre la línea de ribera y el río. Esto fue ratificado por una resolución del ministro de Obras Públicas en el año 2000, cuando se pretendió modificar la línea de Ribera. En el emprendimiento participan Carrefour y el Fondo Fiduciario para el Desarrollo del Plan de Infraestructura Provincial. Este último aporta el predio. Pero la Ley 12.874 es clara cuando establece en el art. 3º inc. B que el patrimonio del fondo está integrado por los bienes del dominio “privado” del Estado provincial.
Estas tierras son parte del Parque Municipal de la Ribera porque así lo establecieron las autoridades en su momento y la participación de la ciudadanía a través de fructíferas jornadas. ¡Qué distancia con lo sucedido en la madrugada del 24 de diciembre donde 20 concejales, excluyendo a los vecinos presentes y a los 4 concejales que se oponían, votaron a puertas cerradas este megacomplejo! Aquellas jornadas de 120 días nada tienen que ver con el trámite de 7 días que se le dio dentro del Concejo Deliberante. La presencia de los colegios, entonces, nada tiene que ver con la negativa de los concejales de la mayoría automática a darle intervención al Conaspe (organismo asesor integrado también por varios consejos profesionales) violando el Código de Ordenamiento Urbano vigente.
¿Por qué las “grandes inversiones” se realizan sobre nuestro parque en un distrito con tanta carencia de espacios verdes? ¿Cómo puede afirmarse que “las críticas al impacto ambiental son infundadas” cuando este estudio está realizado por el mismo profesional que es el responsable de la propuesta vial del emprendimiento y cuando no existe la Declaración de Impacto Ambiental expedida por alguna autoridad ambiental como lo indica la Ley 11.723?
Si los “inversores” pretenden realizar sus negocios sobre nuestros parques y además se creen con autoridad para determinar que no habrá efectos negativos sobre nuestro ambiente, ¿no será ésta una cámara oculta de Tinelli?

Arq. Sonia Martín
Bloque Casa Abierta
Concejal de Vicente López