Foxconn, la empresa que se encarga de montar los productos de Apple en el sur de China, ha sido denunciada por hacer trabajar a estudiantes en las cadenas de montaje para poder cumplir con los plazos de entrega del iPhone5. Las críticas al gigante taiwanés que, con sus 1,2 millón de trabajadores, se encarga de montar los productos de Apple en un tiempo record y unos precios imbatibles, se produjeron después de que varios estudiantes denunciaron que habían sido obligados por sus profesores a trabajar como becarios en la fábrica de Foxconn. Algunos añadieron que les habían advertido que si se negaban a ello podrían ser suspendidos y ver bloqueada la graduación. La incorporación de estudiantes empezó el 30 de agosto y su salario era de 1550 yuanes (190 euros) mensuales para trabajar doce horas diarias, seis días a la semana, con la obligación de hacer horas extra si no terminaban la tarea del día a tiempo.