EL FIN DE LA CONVERTIBILIDAD FAVORECE A UN SELECTO CLUB
La Bolsa ya descontó la devaluación
Petroleras y siderúrgicas serán las firmas más beneficiadas por la devaluación. En cambio, empresas de servicios públicos y bancos sufrirán el golpe de la devaluación.
Por Claudio Zlotnik
Qué pasará a partir de mañana con las acciones, luego de que se haga efectiva la devaluación? Los financistas ya descontaron la desvalorización del peso y algunos papeles, como Siderar, subieron 110 por ciento en el último mes. En medio del terremoto, y con la Argentina en cesación de pagos de su deuda, los papeles empresarios se convirtieron en el refugio preferido de los hombres de la city. Pero ésa es historia pasada y ahora se levantan apuestas sobre lo que acontecerá en el futuro inmediato, con la nueva paridad entre el peso y el dólar.
Si se toma en cuenta lo sucedido con Pérez Companc –el papel más importante de la plaza–, puede concluirse que los inversores ya descontaron la devaluación del tipo de cambio oficial, en torno del 26 al 28,6 por ciento, dependiendo de si la nueva paridad oficial se instala en 1,35 o en 1,40 peso por dólar. Mientras que en Buenos Aires, el papel de Pérez se pagaba 1,91 peso, en Wall Street valía 1,22 dólar.
Precisamente, desde principio de diciembre, con la instauración del corralito, los papeles más beneficiados fueron aquellos de empresas ligadas a la exportación. Siderar y Siderca registraron alzas superiores al 100 por ciento. Pérez Companc duplicó su valor. Por el contrario, los bancos fueron los que menos se favorecieron, con alzas cercanas al 20 por ciento. Pero esas mejoras fueron ungidas por el espanto (el cerrojo bancario, que hizo que muchos inversores compraran acciones para zafar sus depósitos y la expectativa de una devaluación) y no por las perspectivas de una economía floreciente.
Justamente, de aquí en más, la evolución de las acciones dependerá de las expectativas sobre la marcha económica, en principio de la evolución del tipo de cambio y de si aparece un brote inflacionario. Aunque ya se sabe que, dentro del panel accionario, la suerte será desigual.
n Entre las más beneficiadas serán las que tienen atadas sus ventas a dólares. Entre ellas se cuentan a las petroleras (Repsol-YPF y Pérez Companc) y las siderúrgicas (Aluar, Siderca y Siderar). En estos casos, las compañías colocan en los mercados externos el 99 por ciento de sus producciones. Diferente es el caso de Acindar, propiedad de la familia Acevedo. Si bien esta empresa está endeudada en dólares, uno de sus problemas mayores era la competencia que sufría de los productos brasileños. La devaluación dejará más amparada a Acindar.
n Por el contrario, los papeles perjudicados serán aquellos que dependen del mercado interno. Las telefónicas, por ejemplo, a las cuales se les desdolarizaría las tarifas. Y los bancos, que podrían soportar una avalancha de deudores incobrables. Además, la suerte de las entidades financieras dependerá de lo que vaya a ocurrir con el corralito y de si el Gobierno cumple con los pagos comprometidos en la Fase 1 del canje de la deuda.