Por Aldo Garzon

Si no están llegando al mercado todos los dólares que se esperaba por parte de los exportadores, algo está pasando en el medio del proceso de liquidación de divisas o el Gobierno no cuenta con toda la información disponible para quejarse. Para Raúl Padilla, presidente de la Cámara de la Industria Aceitera, el problema no es de ellos, sino de las entidades financieras, que no liberan a la plaza cambiaria los dólares que reciben de los exportadores.
Desde mediados de febrero, los exportadores de granos y aceites han liquidado en el mercado, según Padilla, unos 500 millones de dólares. El punto de partida para ese cálculo es significativo, ya que fue por ese período que los exportadores acordaron con el Gobierno el cobro en cuotas, hasta el 15 de abril, lo que se les adeuda por reintegros del IVA.
De manera que los exportadores aseguran que no retienen dólares especulando con un incumplimiento de la administración Duhalde sobre ese compromiso, aunque, en realidad, tienen pocas esperanzas de que le alcance los fondos al Gobierno para honrar ese acuerdo.
“Es imposible que no liquidemos dólares porque eso es lo que debemos hacer para pagar en pesos al productor en el mismo momento en que compramos la materia prima”, afirmó Padilla a Cash. Esas operaciones, según el titular de Ciara, admiten hasta un plazo de 120 días para la liquidación de divisas en el caso de las oleaginosas, pero el proceso sería tan fluido que nunca pasaría de una semana.
Esto no tiene nada que ver con el pago de las retenciones a las exportaciones agropecuarias, que deben ser pagadas no más allá de las 72 horas posteriores al embarque de la mercadería.
Por otra parte, si el Gobierno está esperando una liquidación masiva de dólares en el segundo trimestre del año, con motivo de la cosecha gruesa, se encontrará con una sorpresa adicional. Por ejemplo, si se toma una producción de soja de 28 millones de toneladas, a un valor de 4000 millones de dólares, sólo el 40 por ciento de ese total (1600 millones) se volcará al mercado entre abril y fines de junio, ya que el resto de las compras se distribuye a lo largo del año.