¿Cuándo comienza la renegociación con los acreedores externos?
–Inmediatamente después del arreglo con el Fondo Monetario Internacional. Antes no tendría sentido. El primer paso es recobrar la confianza y para eso necesitamos el apoyo del Fondo. A partir de ahí los números estarán más claros.
¿Cómo va a ser la negociación?
–Vamos a pedirles a nuestros acreedores que aguanten al país en este momento tan difícil y los vamos a retribuir con el fruto del crecimiento de la economía. La idea no es que pierdan su dinero. Sino que sepan esperar a que la economía se recupere. Van a recibir menos en el corto plazo y más en el largo. Seguramente la oferta va a ser bien recibida. No estoy de acuerdo con las versiones sobre quitas de hasta el 70 por ciento que andan dando vuelta por ahí. No se puede hablar de números sueltos, sino de una lógica de financiar el crecimiento. El default argentino es el más alto de la historia y hay muchos interesados en que termine bien. Eso juega a favor nuestro.