Paul McCartney convirtió la sala Electric Ballroom de Londres en una reunión de amigos, donde apenas mil personas disfrutaron las canciones de su nuevo disco, Memory Almost Full. El beatle sorprendió con un concierto mantenido en secreto en una pequeña sala del barrio de Camden que, anunciado el jueves por la mañana, agotó sus entradas en trece minutos. Con asistentes célebres como el guitarrista David Gilmour y la modelo Kate Moss, el músico combinó nuevas canciones como “House of wax”, “That was me” y “Nod your head” con clásicos como “Drive my car”, “Get back”, “I saw her standing there”, “Blackbird” y “Hey Jude”. El momento más emotivo, de todos modos, fue la dedicatoria de “Here today”: “Esta canción fue escrita para John. Querría dedicarla a todos nuestros héroes caídos”, dijo.