Misión aventura es una serie del canal infantil Pakapaka que ya ha dado muestras de su capacidad para enganchar a los chicos con un contenido tan didáctico como divertido. El héroe de esta historia es Alex Tremo (todo un logro del actor Emiliano Larea, y un personaje que ha protagonizado también otras series del canal), un “intrépido aventurero” un poco torpe, pero de lo más dispuesto y entusiasta para encarar misiones y aventuras. La señal infantil del Ministerio de Educación, en una producción conjunta con el Conicet, estrenó una nueva temporada de la serie, que puede volver a verse a partir de hoy, los sábados y domingos a las 13.30 y a las 19.30.

En esta nueva temporada, Alex recibe el llamado de chicos y chicas de distintos puntos del país, que le piden ayuda para lograr una misión: puede ser llegar a algún lugar escondido, dar con un ejemplar difícil de encontrar –el pingüino papúa, en Ushuaia, por ejemplo– o develar un enigma de la región. Para poder resolver esa misión, en cada capítulo los chicos y Alex reciben la ayuda de un especialista o investigador del Conicet. Claro que en el medio tienen que sortear una cantidad de desafíos y dificultades; mientras tanto, todo un mundo de conocimiento, muy marcado por la región que aborda cada capítulo, se abre para explorar también del otro lado de la pantalla.

Así, por ejemplo, Alex puede recibir la llamada de Lucas y Micaela, de San Pedro de Colalao, en Tucumán, quienes le piden ayuda para proteger la Piedra Pintada. Y entonces, junto al arqueólogo Mariano Corvalán, el equipo de Misión aventura –y con ellos, los espectadores– cabalga por los cerros de la provincia, conoce los paisajes naturales, aprende sobre el legado de las civilizaciones originarias y sobre el particular trabajo de los arqueólogos. En otro capítulo, la serie explora el mundo de los dinosaurios: Fede y Malena, dos chicos de Trelew, llaman a Alex para examinar un esqueleto de dinosaurio. Cuando llega el aventurero, juntos conocen las tareas del técnico paleontológico Pablo Puerta, y de los paleontólogos Diego Pol y Marcos Becerra, con quienes viajan por la Patagonia en busca de fósiles de los que fueron los habitantes de esas tierras, millones de años atrás. La Misión aventura sigue por el sur argentino: Thiago y Juana, dos chicos de Ushuaia, piden la ayuda de Alex para averiguar por qué cada vez se ven menos centollas por allí. Junto a los biólogos Gustavo Lovrich y María Gowland Sáinz buscan estos crustáceos y conocen el trabajo que se hace con ellos en el laboratorio, en pos de la preservación del medio ambiente.

Tan encantadores como el personaje de Alex Tremo son los chicos elegidos para protagonizar cada capítulo, que se mueven con total naturalidad frente a las cámaras. El recorrido abarca otras locaciones como Cachi, en Salta, Tafí del Valle, en Tucumán, o Puerto Madryn, en Chubut, y el registro aprovecha las bellezas naturales de cada uno de esos paisajes. Con un trabajo cuidado de guión, edición y dirección de cámaras, el resultado es una muy buena opción en la tele para los chicos, con contenidos educativos, pero presentados como una serie de aventuras.