Mariana Baggio será parte del ciclo, que incluye una gran juntada de orquestas de chicos y chicas y un homenaje a María Teresa Corral.

El Espacio Cultural Nuestros Hijos (ECuNHi) y el Movimiento de Música para Niños (Momusi) organizaron en conjunto el ciclo infantil “Crece desde el pie”, con una programación que abarca las mejores expresiones de la música para chicos que se está haciendo en el país. Además de invitar a compartir esta música, se propone en defensa de las orquestas y coros infanto-juveniles, un derecho para 20 mil chicos y adolescentes que está en riesgo con la nueva gestión. “No solamente vamos a gritar por la situación crítica de las orquestas y del ECuNHi. Vamos a hacer lo que sabemos hacer: música, y del mejor nivel”, anticipa a Página/12 Julio Calvo, integrante del Momusi y de la histórica formación Los Musiqueros. El ciclo comienza este sábado a las 15 y seguirá durante todo el mes, con la participación de Mariana Baggio, Lalá y el Toque Toque y Koufequin, una gran juntada de orquestas de chicos y chicas y un homenaje especial a María Teresa Corral, celebrando nuevas ediciones de sus discos.

Buena parte de los dos mil docentes del Programa de Orquestas y Coros Infantiles y Juveniles para el Bicentenario –que depende del Ministerio de Educación de la Nación– está trabajando sin cobrar y sin contrato, o con contratos que finalizan a la brevedad. A esto y a las intenciones del Gobierno de descentralizar el programa, quitando atribuciones al Estado Nacional, se sumó en los últimos días el despido de su coordinador y fundador, Claudio Espector. La preocupación crece con cada noticia porque los más perjudicados por la situación son chicos y adolescentes de zonas vulnerables de todo el país, que de otro modo no tendrían acceso a la enseñanza musical. El ECuNHi y el Momusi decidieron darle a su ciclo también el carácter de defensa de este programa. “Las orquestas son mucho más que música. Son crecimiento y pertenencia. Para los pibes y sus familias implican sentirse elegidos por una vez; pertenecer al mundo de todos, no al marginal al que siempre los han recluido. Es un programa crucial y están intentando matarlo”, reflexiona Calvo.

La apertura de Crece desde el Pie –que toma su nombre de una canción de Zitarrosa– estará a cargo de Mariana Baggio y la Orquesta Tunquelén. Compuesta por 60 chicos de entre 8 y 12 años, forma parte del Programa Andrés Chazarreta, del Ministerio de Cultura de la Nación, otro proyecto de calidad. “Me apena muchísimo lo que está sucediendo, porque las orquestas cumplen un rol social muy importante. Es precioso lo que se logró y es una tristeza total que se desarme”, expresa Baggio. “La música es transformadora: sirve para canalizar, afloja, saca tristezas, da alegría. Privar a tantos niños de esa experiencia, que ya se sabe que funciona bárbaro, es un crimen”, sentencia una de las más reconocidas compositoras e intérpretes de música para niños del país, que con quince años de trayectoria imprimió una marca propia en la escena local de la canción infantil.

El ciclo tendrá un espíritu de lucha, no solamente por el conflicto de las orquestas, sino también por la situación que atraviesa la casa artística y educativa de las Madres de Plaza de Mayo, que en esta nueva etapa política carece de financiamiento del Estado. “Pero no sólo vamos a ‘patear’ y gritar”, aclara Calvo, y recalca que los artistas que se presentarán son “de altísimo nivel”. “Tratamos a los chicos con absoluto respeto. Cada grupo del Momusi tiene una forma de hacer música y de dirigirse a los pibes que es absolutamente particular. No van a encontrar estereotipos, sino gente que ha dedicado su vida a hacer arte para los pibes, con un claro y definitivo sesgo”, define el integrante de Los Musiqueros.

Fundado en 1997, el Movimiento de Música para Niños reúne a intérpretes, compositores, comunicadores, docentes y gestores culturales que trabajan en favor del desarrollo de la música para niños, haciendo hincapié en la identidad y en la calidad de las expresiones. “La característica fundamental es que hacemos música de autor. Esto no quiere decir que solamente tenemos canciones originales, pero siempre las hacemos desde el lugar de la autoría, que significa pensar versiones específicas y de qué modo llevar eso al público. Para nosotros, la música es igual para cualquiera, para adultos o niños. Nos exigimos al máximo”, completa Calvo.

Mariana Baggio estará presentando Barcos y Mariposas 4, un disco que tiene la particularidad de recorrer diversos ritmos e instrumentos. “Haremos una mescolanza. Si bien presentamos este material, también estarán los ‘grandes hits’. Si no los hacemos se nos enojan”, adelanta la compositora. Tras su presentación será el turno, el sábado 14, de Lalá y el Toque Toque, dúo de Karina Antonelli y Osvaldo Belmonte, que también mostrará canciones de un nuevo disco, con la compañía de una orquesta invitada. El show revivirá los años 40 y 50, época de baile, gags, radio, tango, mambo y tap.

“El Momusi y el ECuNHi se caracterizan por seleccionar bandas de calidad, con un entendimiento particular de la infancia, un respeto por el niño”, resume Baggio. En esa línea, el sábado 28 de mayo será el turno de Koufequin, otra banda que tiene un bien ganado espacio en esa “música de autor” de la que habla Calvo. Ese día habrá también un homenaje a María Teresa Corral, fundadora del Momusi, compositora, cantautora, educadora y productora, que en el último tiempo está editando nuevos y viejos discos, como el que acaba de salir por el sello de la Biblioteca Nacional –y que constituye la última edición musical de esta institución, que ya anunció que no continuará con la tarea–. Antes, el sábado 21 de mayo, una gran juntada orquestal con invitados como Bruno Arias mostrará cuán buena es la música que hacen los chicos, chicas y jóvenes de las orquestas que hoy corren peligro de cerrarse. Las jornadas en el ECuNHi (Avenida del Libertador 8151, ex ESMA) se completarán con stands de libros, instrumentos y remeras. La entrada es un bono contribución.

Tanto Baggio como Calvo admiran la labor que viene desarrollando el ECuNHi y hablan con mucho cariño sobre la casa de las Madres. “Es un espacio logrado, muy querido. Es impresionante cómo han logrado transformarlo: un lugar de dolor extremo pasó a ser uno en que los niños corretean, juegan, escuchan música y ven teatro. ¿Cómo puede ser que se desfinancie?”, se pregunta Baggio. “Estos espacios tienen que seguir, dio mucho trabajo armarlos. El ECuNHi se armó con cariño y esfuerzo, mucha gente trabajó para eso.” La intérprete recuerda especialmente su participación en el último Festival María Elena Walsh, al que asistieron nada menos que 10 mil personas. “Fue multitudinario, con mucha energía, hermoso”, describe. “Tocar en cualquiera de los lugares del Espacio Memoria produce una emoción muy especial”, dice Calvo. “Qué mejor respuesta que llenar esos espacios de pibes. Es la más contundente, extraordinaria y vital. Además, cuando tocamos las Madres están ahí, escuchándonos. Ellas cruzan nuestra historia. Son ejemplo de lucha, dignidad y vida”, concluye el músico.

Se reestrena Al mundo en clarinete, un viaje por el mundo de la música con la batuta de Sergio Feferovich y los vientos de una destacada orquesta. Todos los sábados y domingos a las 15 en el teatro La Comedia, Rodríguez Peña 1062.