En declaraciones al diario británico The Sunday Times, Woody Allen aseguró que no le importa qué ocurrirá con su legado cuando ya no esté. “Me da igual si juntan todas mis películas y las queman”, dijo el cineasta estadounidense. Durante la entrevista, además, afirmó: “El mundo entero puede ir a tu tumba y elogiarte, pero eso no significa nada. Cuando uno se fue, se fue. Simplemente quiero que me incineren”, concluyó el realizador que acaba de estrenar Magia a luz de la luna, ambientada en la Riviera Francesa de la década del ’20, con Colin Firth, Eilen Atkins y Emma Stone, y está trabajando en una nueva producción, que todavía no tiene título, junto con Joaquin Phoenix y Stone, para estrenar en 2015.