“David es uno de los mejores artistas con los que he trabajado. Pero cada vez que lo veo, aun antes de que le diga nada me dice: ‘No voy a hacer más giras’.” Con esa lapidaria frase, John Giddings, organizador del célebre festival Isle of Wight, echó por tierra cualquier presunción sobre un posible regreso de David Bowie a los escenarios. Retirado de los shows desde 2004, el músico británico de 68 años disparó esperanzas de un regreso a la actividad en vivo con el sorpresivo lanzamiento de The Next Day el año pasado. Pero Giddings remarcó ayer que “él ha decidido retirarse, y es en vano pedirle que vuelva”.