La cantante norteamericana Madonna debió ser hospitalizada ayer, martes, después de sufrir un accidente y provocarse varias fracturas tras caerse de un caballo cuando celebraba su 47º cumpleaños en su fastuosa residencia de las afueras de Londres. La noticia fue confirmada por una portavoz de la artista que recientemente fue tapa de la revista Vogue, posando como una aristócrata inglesa en los jardines de su mansión. La cantante se rompió “tres costillas, una mano y la clavícula” en la caída, pero, seguramente, “podrá ser dada de alta esta misma noche”, según la misma fuente. El accidente, del que se desconocen los pormenores, ocurrió el martes al mediodía en la residencia de la cantante en el condado de Wiltshire, al sudoeste de Inglaterra, durante una cabalgata festiva con su marido, el director cinematográfico británico Guy Ritchie, y sus dos hijos, Lourdes y Rocco. Madonna reside en Londres desde su unión con Ritchie.