El director argentino Miguel Pereira estrenó ayer en el Festival Internacional de Cine de Karlovy Vary su película El destino, en la que arremete con dureza contra el fenómeno de la globalización, a través de la metáfora de una segunda conquista de Latinoamérica por los españoles. La película es una de las tres cintas de habla hispana que opta al Globo de Cristal en la 41ª edición de este festival. El cineasta, director del Festival de Cine del Mar de Plata, estudió cinematografía en Londres y ha realizado numerosos documentales sobre el norte del país, en especial acerca de la región fronteriza con Bolivia. “Se trata de una metáfora, sobre algo que ha ocurrido durante la década del 90”, explicó Pereira.