Las imágenes flotan en la memoria colectiva: en el inicio, escombros, voluntarios llenos de polvo, pedidos de baldes y palas para rescatar sobrevivientes; al poco tiempo, edificios con pilotes a lo largo de su fachada y agentes de seguridad controlando el acceso; luego, marchas exigiendo justicia. Hoy se cumple un nuevo aniversario del atentado a la AMIA y ya son doce las veces que se ha recordado aquel 18 de julio de 1994 en el cual a las 9.53 de la mañana una explosión paralizó la ciudad de Buenos Aires, dejando un saldo de ochenta y cinco muertos y trescientos heridos. La memoria es parte esencial del trabajo que realizan los pueblos para encontrar justicia y desarrollar conciencia. Para ejercitar estos preceptos, la Asociación Mutual Israelita Argentina y sus allegados han realizado numerosas actividades en todo este tiempo, como producir el compendio de cortometrajes 18-J, en el cual diez reconocidos directores del cine argentino expusieron la mirada que le dictaban los hechos.

Quizá la pregunta esencial para disparar el recuerdo es la misma de siempre: ¿qué estaba haciendo o dónde estaba cada ciudadano cuando explotó la AMIA? Las respuestas pueden dar numerosas evidencias acerca del grado de concientización, información y compromiso. En auxilio para el recuerdo la mutual ha tenido para este aniversario varias manos que la ayudaron. A lo largo de los doce días anteriores al cumplimiento del aniversario se han realizado diferentes actividades: instalación de “pilotes simbólicos” en organizaciones de la sociedad argentina y difusión en medios de comunicación del spot publicitario Insoportable en radios y emisoras de televisión. En el espacio AMIA (Pasteur 633), una muestra de fotografías de Daniel Caldirola está compuesta por retratos de los famosos pilotes; el fotógrafo explica: “Al principio fueron tanques de 200 litros llenos de cemento y posteriormente fueron sustituidos por elementos o construcciones emplazados en forma permanente. A nivel conceptual se revivió algo que es tan antiguo como la humanidad: la fortificación”. Los pilotes, explican en la Mutual, representan a los que quisieron separar y excluir a las instituciones judías de la comunidad en general y no lo pudieron lograr.

Varias organizaciones se sumaron, dejando en evidencia la pluralidad de la propuesta, como la Catedral de Buenos Aires, el Colegio Carlos Pellegrini, la Biblioteca Nacional y la Asociación Cristiana de Jóvenes. El spot que comienza con doce segundos de pantalla negra y audio de gritos, sirenas y transmisiones de radio y TV anunciando “parece que explotó la AMIA”, termina con fotos del atentado y las frases “12 segundos de confusión pueden parecer eternos, 12 años sin justicia son insoportables”. El corto fue producido por Cuatro Cabezas, posproducido por Cinecolor y distribuido por FilmSuez. A su vez, el spot de radio se escucha en las principales emisoras nacionales desde el 1º de julio, en horarios rotativos. Asimismo, el Gobierno emitió un decreto nacional que declara el 18 de julio como Día de Duelo Nacional, en homenaje a las víctimas. Por último, hoy a la hora del atentado se realizará un acto en la puerta de la sede de la Mutual, al tiempo que las iglesias porteñas tocarán sus campanas recordando el momento. En este aniversario, la consigna levantada como bandera por los que participarán en el recuerdo sigue siendo “Todos somos AMIA”.

Informe: Suyay Benedetti.