En conmemoración de los 47 años de la muerte del Che Guevara, a manos del ejército boliviano, el 9 de octubre pasado, una delegación de Argentina viajó a Bolivia para encabezar una serie de actos en la ciudad de Vallegrande. La ceremonia, que tuvo lugar donde fueron enterrados los restos de otros guerrilleros, entre ellos de Tania, la argentina que murió en una emboscada en agosto de 1967, a los 30 años, tuvo un cierre especial con un concierto de León Gieco y la banda Animal de Ciudad. En ese marco, el músico cantó a cappella y manifestó su alegría por vivir ese momento. “Estamos cumpliendo con lo que sabemos, con nuestras canciones”, expresó. La jornada contó con la presencia del embajador argentino en La Paz, Ariel Basteiro; el secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, y un representante de la Presidencia argentina, Carlos López, quienes encabezaron el homenaje en la ciudad de los valles cruceños. Luego, la comitiva se trasladó hacia el Memorial de Che, donde se entonaron los himnos de Bolivia, Argentina y Cuba. Los representantes de los gobiernos visitantes coincidieron en destacar la personalidad del mítico revolucionario, con énfasis en el humanismo e internacionalismo de sus pensamientos. Los actos también contaron con la presencia del hermano menor del guerrillero, Juan Martín Guevara, y del cineasta Tristán Bauer, autor de un documental sobre el Che, que destacó que, más que un argentino cubano, fue un hombre universal. “La historia y el amor no se pueden borrar, y qué hermoso estar aquí, qué hermoso ver que hay un continente que con su diversidad florece todos los días, desde las ideas del Che”, manifestó el director. La exhibición de su película Che, un hombre nuevo, producida en 2010, también fue parte de las actividades.