KK DOWNING, GUITARRISTA DE JUDAS
La ortodoxia metálica
KK Downing, guitarrista fundador de los emblemáticos Judas Priest, rechaza rotundamente la primera pregunta. ¿Se sienten más cerca de Iron Maiden o de Whitesnake?: “De ninguna de las dos –responde–, Judas es única y a ninguno de nosotros nos gustan otras bandas”. La afrenta es dura como la música que proponen desde al menos Sad wings of destinity (1976) o, más claramente, desde British Steel (1980), e intentarán refrendarla hoy como encargados de cerrar el Monsters of Rock, a partir de las 21. “Estamos seguros de que somos una banda de gran significación para el mundo metálico”, insiste Downing, ante Página/12. El grupo de Birmingham, Inglaterra, presentará Angel of Retribution, 15º álbum de la banda. Y trae entre manos dos perlitas, que recuerdan al fabuloso Painkiller (1990): Judas Rising y Deal with the devil. “Estamos absolutamente orgullosos de este disco, creo que retornamos a la normalidad”, señala Downing. “Tenemos mucha energía y todos los cilindros encendidos: se nota en este álbum. Yo pienso que es el más natural de Judas. Mucha gente que lo ha escuchado dijo que es eterno”, completa el otro guitarrista, Glenn Tipton.
La visión de ambos violeros remite directamente al pasado inmediato. Entre 1996 y 2003, la banda atravesó un período bastante opaco tras la ida de Rob Halford, el cantante de voz aguda que le imprimió a Judas la estética hard con sus látigos, muñequeras y ropas de cuero negro. Y lo reemplazó Tim “Ripper” Owens –hoy cantante de Iced Earth–, cuya performance en apariencia no conformó al público ni a sus propios compañeros. “Ripper era un individuo frío –corrobora Downing– y nosotros somos, por supuesto, muy cerrados con Halford. Hemos conocido mucho a ambos y definimos que él es el mejor vocalista que hay. Es fantástico tener la formación original de nuevo, como debió ser siempre.” En efecto, Halford se reintegró a Judas en 2003, participó de “Reunited”, la extensa gira por Europa y EE.UU. que el grupo llevó a cabo durante 2004 y hoy llega a Argentina junto a dos miembros fundadores: el mismo Downing y el bajista Ian Hill, más Tipton, que se integró poco después de Halford –cuando Judas debutó en bateas con Rocka Rolla en 1974– y Scott Travis, baterista y último en arribar a la agrupación durante la época de Painkiller. Downing, que recuerda que la banda tuvo un origen hippie (“heavy metal hippie”, dice), la define como “ortodoxa y tradicional” y promete que el show de hoy será “fantástico”.