espectaculos

Lunes, 24 de febrero de 2014

SERIES › EL PRóXIMO MIéRCOLES ESTRENA THE CRAZY ONES, POR FOX

El alocado mundo de las marcas

Robin Williams vuelve a la TV para protagonizar una sitcom, a más de tres décadas de Mork y Mindy. Secundado por Sarah Michelle Gellar, el actor luce desbocado como hacía tiempo no se lo veía. Las primeras emisiones en los Estados Unidos fueron un éxito.

 Por Federico Lisica

Es difícil que The Crazy Ones (el estreno aquí será el próximo miércoles a las 22.30 por Fox) consiga lo que Mork y Mindy tres décadas atrás. ¿Cuántos repitieron el célebre saludo “Nanu Nanu” de Robin Williams en la piel de aquel alienígena híper excitado? Imposible saberlo. O tal vez sí lo logre, ya que las primeras emisiones de su nueva serie en Estados Unidos fueron un rotundo éxito, y puede que haya varios que imiten los modismos del publicista Simon Roberts. Una cosa es segura, este programa marca la vuelta del comediante a la pantalla chica después de mucho tiempo. Y lo hace en su estado más afiebrado, como con aquel E.T. que le sirvió de trampolín; un estilo que le valió tantos amantes como detractores y que atrae con su intensidad. The Crazy Ones es una auténtica sitcom de treinta minutos de duración, pero con la modernidad de The Office en adelante: nada de risas grabadas y una mayor libertad de espacios, escenarios y movimientos de cámara.

Aquí, Williams encarna a un excéntrico creativo del marketing que comanda una agencia en Chicago. El actor apela a su amplia batería de mohines, voces y a su famosa capacidad de improvisación (muchas de las escenas surgen de los juegos espontáneos a los que invita el actor). ¿Pero quién es Simon Roberts? “Es un tipo capaz de venderle fra-ppuccinos a Starbucks y nubes a Dios”, clarificó Williams. Este “hombre loco” del mundo de las marcas también estuvo al tope de su juego, cayó, recayó en vicios, pasó por divorcios, derrapes y ahora vuelve a la cima cuando parecía derrotado. Una de las líneas principales de la ficción es la relación con su hija Sydney, interpretada por Sarah Michelle Gellar. “Nuestros roles son como el yin y el yang, ella es un poco rígida, quiere tener todo controlado en una caja, lo cual es imposible cuando tu padre es Robin Williams”, declaró quien se hiciera famosa por su papel en Buffy, la cazavampiros. “La relación que tenemos es como cuando tu hijo de tres años dice algo realmente inapropiado y no podés contener la risa. Ese es el tipo de vida que tenés cuando trabajás con Robin”, añadió la actriz.

Al inicio arrollador (su competencia era The Michael J. Fox Show, que fue cancelado) le siguió la temprana confirmación de toda la temporada. Siendo un producto de David E. Kelley (Chicago Hope, The Practice, Ally Mc Beal) no sería ilógico que entre tanta carcajada haya lugar para que Williams recurra a la paleta dramática que le valió un Oscar por En busca del destino. El sello de Kelley implica elencos mixtos o que un personaje secundario domine todo un capítulo. El actor que surgió de la camada de John Belushi, Chevy Chase y Steve Martin declaró que fueron los guiones refinados del creador de The Crazy Ones y la idea de rodar de un modo bien directo, los que lo convencieron para sumarse al proyecto. Tampoco hizo falta mucho para que volviera a la TV: “David me llamó una sola vez y dije que sí, es tan calmado, hablar con David es como tomar Prozac, se siente muy bien”, bromeó.

The Crazy Ones, por otra parte, ahonda en el mundo de la publicidad al igual que Mad Men. El único punto de contacto evidente es el del contexto junto a la mención de marcas y personas reales. Lo que en la producción de HBO es un registro de época elegante, aquí sirve para un desborde más que actual. En el primer capítulo, Roberts está a punto de perder la cuenta de McDonald’s, marca que busca modernizarse sin perder su toque familiar. El genio hiperkinético conseguirá que el jingle de un spot lo haga Kelly Clarkson (cantante surgida de un reality). La celebrity acepta pero, en plan Miley Cyrus, quiere hacer la canción como si fuese una sobre sexo. Lo que se dice un conflicto de intereses para la cadena de comidas rápidas, la intérprete, la agencia... y un buen punto para una sitcom.

Compartir: 

Twitter

Williams encarna a un excéntrico creativo del marketing que comanda una agencia en Chicago.
 
CULTURA Y ESPECTáCULOS
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.