Se suele confiar en lo que receta el médico, más aún si es un galeno televisivo, desde George Clooney en E.R. Emergencias hasta el excéntrico Gregory House. Pocos trabajos más santificados para la ficción televisiva que el de los hombres del bisturí y el ambo blanco. The Knick (va por HBO los viernes a las 22) quiere cambiar esa mirada. Dirigida por Steven Soderbergh y protagonizada por Clive Owen (foto), la serie de diez episodios se adentra en el mundo de los cirujanos de comienzo del siglo pasado en Nueva York. Al igual que Masters of Sex, este drama examina el pasado de la ciencia. Aunque sin las ataduras de nombres reales, The Knick (que hace referencia al Hospital Knickerbocker) cuenta las historias de los cirujanos, enfermeras y personal, en una época donde la muerte era la norma en las instituciones hospitalarias. Owen interpreta a John Thackery, un médico que pone a prueba los límites de la medicina tradicional. Lo racial y lo moral también es materia de debate en The Knick. El mismo Thackery es cocainómano (cuando esa droga era legal) y prejuicioso con su ayudante negro, Algernon Edwards (André Holland). Incómoda y necesaria como ir al médico, a veces algo lenta como esperar en una guardia, interesante y pedagógica como leer un prospecto: así es The Knick, que ya se ha asegurado una segunda temporada.