Los integrantes de las orquestas del Colón tocaron como protesta, frente a la Legislatura porteña.
Imagen: Télam.

El próximo 23 sería el día. Se anunció que Plácido Domingo actuaría, primero en el Teatro Colón y, luego, en la calle. Pero, hasta ahora, el Colón está sin actividades y los únicos conciertos en la calle son los que, como el de ayer frente a la Legislatura de la Ciudad, dan integrantes de las orquestas Filarmónica de Buenos Aires y Estable del Teatro Colón, en protesta por la falta de respuesta a sus demandas salariales y a las sanciones que el gobierno municipal decidió contra ellos a raíz de las medidas de fuerza encaradas desde fines del año pasado. Y es que los conciertos del famoso tenor serán con orquesta, pero la orquesta que estaba previsto que lo acompañaría está en paro.

El Teatro Colón, que sumarió y suspendió a parte de los participantes en la asamblea que decidió el cese de actividades y, además, demandó por 55 millones de pesos, en concepto de daños pasados y futuros, a los delegados de ATE (uno de los dos gremios con injerencia en esa repartición), suspendió sus funciones a partir de noviembre del año pasado y aún no ha puesto en venta los abonos para este año. El comienzo de la temporada sería el próximo 29 de este mes, con la ópera El gran macabro, de György Ligeti, en versión escénica de La Fura dels Baus, pero la falta de ensayos con la orquesta hará imposible tal inicio. Según adelantó este diario, la obra subirá a escena mutilada, en una versión de ensayo con dos pianos y percusión. Nada más alejado del carácter de la obra y de la voluntad de un compositor tan detallista que, en vida, llegó incluso a prohibir la representación con una orquestación anterior a su última revisión, realizada en la década de 1980.

El conflicto en el Colón no tiene solución a la vista. La dirección del teatro se mantiene firme en su voluntad de castigar a los huelguistas, aunque todo indica que tanto los sumarios como los juicios tendrán resoluciones favorables a los trabajadores, y sostiene que ya ha firmado un acuerdo con Sutecba (el otro gremio que, en realidad, nunca se había plegado a las medidas de fuerza) que fue aceptado por parte de la planta del teatro (en particular los empleados administrativos, técnicos y escenotécnicos). Los delegados de ATE, y los trabajadores que se encolumnan con ellos, piden la concreción del aumento de un 40 por ciento que las propias autoridades consideraron justo –aunque, curiosamente, imposible de otorgar– y el levantamiento de las sanciones. En los hechos, además de la temporada del teatro, también está en duda el concierto de Domingo. Los músicos hicieron conocer un comunicado dirigido a sus colegas de otras orquestas donde dicen: “Los integrantes de la Orquesta Estable del Teatro Colón y de la Orquesta Filarmónica de Buenos Aires les informarmos que debido al grave y prolongado conflicto con cese absoluto de actividades, que mantenemos con la dirección del Ente Autárquico Teatro Colón, no podemos aceptar la convocatoria para participar del concierto de Plácido Domingo, ya que tanto los ensayos como una parte de la función se llevarán a cabo en nuestro lugar de trabajo (Teatro Colón de Buenos Aires), sede del actual conflicto. Consideramos que, por su gravedad, la presente situación debe ser conocida por todos los colegas del país”.

Hoy a la tarde, el director del Teatro Colón, Pedro Pablo García Caffi, brindará una conferencia de prensa donde explicará el affaire de El gran macabro reducido al piano (y convertido en un pequeño macabrín) y comunicará sus planes en cuanto a nuevas fechas de funciones y venta de entradas. Mientras tanto, en el acto de ayer, el delegado general adjunto del teatro, Máximo Parpagnoli, vaticinó una “temporada bochornosa, un papelón histórico y una incertidumbre absoluta sobre el ciclo 2011” y Rodolfo Arrechea, secretario general de ATE Capital, dijo que “si la persecución hacia los trabajadores contratados continúa, el conflicto se extenderá”. Instó a que el gobierno porteño “rompa los sumarios contra todos los trabajadores del Teatro Colón” y afirmó que “la plata para recomponer el salario en un 40 por ciento está, lo que falta es la decisión política de hacerlo”. Además, propuso a las autoridades de la ciudad que “revean el mantenimiento en el cargo del director general del Teatro Colón, Pedro García Caffi, quien pretende dirigir algo que no dirige y no puede garantizar nada”.