Las aguas rioplatenses están revueltas. Cuando los paradigmas tiemblan, todo se mueve. Y en esta deriva imprevisible la literatura recupera un halo radioactivo, el espíritu festivo de la horizontalidad, del cara a cara, esa vibración perdida por exceso de solemnidad. La muchachada uruguaya está embalada. Le sobran razones para andar de “acá para allá”, cosechando entusiasmos a través del flamante proyecto “Ya te conté” –Encuentros sobre narrativas recientes del Río de la Plata–, una iniciativa literalmente hecha a pulmón que rastrea y difunde el corpus literario que salió a la cancha a partir de los años ’90 en diversos formatos: libros, revistas, blogs y redes sociales. Y que apuesta, fundamentalmente, al diálogo descontracturado entre narradores de ambas orillas; charlas apenas orientadas por un disparador temático donde no puede faltar la cerveza, acaso moderadora “invisible”, óptima para ablandar las lenguas y conseguir ese envión definitivo hacia una experiencia inolvidable.

Un grupo de amigos, estudiantes de Letras la mayoría, comenzaron a juntarse en 2007. La desazón cundió cuando se enteraron del resultado de una miniencuesta que lanzaron para tomar la temperatura ambiente. El único requisito era nombrar al menos cinco escritores uruguayos vivos menores de cincuenta años. “¡No nombraban ni uno!”, recuerda Lucía Germano, una de las ideólogas con los ojos como platos asombrados. Entonces decidieron encarar –y encarnar– la peliaguda faena de achicar esa brecha de desconocimiento, el divorcio entre el público lector con los autores que vienen publicando hace más de dos décadas. La primera escala de un alboroto descomunal fue el 19 de enero pasado en Barra de Valizas, un pueblito playero próximo a Cabo Polonio. La segunda será el 5 y 6 de abril, en Buenos Aires, en el bar Orsai y en Eloísa Cartonera.

Antes de adelantar la cinta conviene volver sobre el pequeño fenómeno generado en Valizas hace poco más de un mes. “Es un lugar bien playero con cero infraestructura –cuenta Germano a Página/12, acompañada por Débora Quiring Perroux–. El local donde nos juntamos fue en la Asociación de Fomento Barra de Valizas, unas viejas anarquistas de 90 años que abrieron un centro cultural y hacen kermesses para las escuelas. Hicimos, además, una miniferia del libro. Y sentamos a dialogar a escritores, críticos y editores en un plano horizontal: Pedro Mairal, Chiri Basilis, Washington Cucurto y Elsa Drucaroff (de Argentina), y de Uruguay Gabriel Peveroni, Daniel Mella, Gustavo Espinosa, Ramiro Sanchiz y Rodolfo Santull.” Ese sábado 19 de enero, temprano, el colectivo “Ya te conté” –integrado además por Diego Recoba, Jorge Fierro, Federico Giordano, María José Olivera Mazzini, Gabriela Rama y Débora Rostán– salió a volantear en la playa para anunciar el Primer Encuentro. El local se llenó. Los audios del encuentro se pueden escuchar en la plataforma de debate y rescate http://www.yateconte.com. “Esto es un proyecto puente –lo define Débora–. La gente podía conseguir los libros de los autores argentinos que en Uruguay no se consiguen ni por encargue. Y se vendió mucho. El público era muy diverso: desde chicos de 18 años hasta viejas de 90. No sé cómo será acá, pero en Uruguay la literatura está circunscripta a ámbitos académicos y contextos puntuales. Queremos tender redes y acercar a los escritores.”

Lucía plantea que el problema, al menos en Uruguay, es que el potencial público lector considera que el escritor está en otro lugar, más arriba o más allá. “Muchos lectores creen que determinados libros no son para ellos. ‘Esto no es para mí’, dicen. Y se sorprenden, como pasó en Valizas, cuando el escritor que está entre el público, como uno más, sube a la mesa y empieza a hablar. Entonces se animan a preguntar y después terminan tomando juntos una cerveza. Y comprando los libros.” Lucía y Débora estuvieron en Buenos Aires para avanzar en los detalles de la próxima fiesta en ciernes, el viernes 5 y el sábado 6 de abril, en el bar Orsai y en Eloísa Cartonera, respectivamente. Una de las mesas se titulará “Editar o muerte”, y entre los invitados confirmados están Félix Bruzzone (Tamarisco), Adriana Astutti (Beatriz Viterbo) y el uruguayo Diego Recoba (La Propia Cartonera). “Bienvenido pop” es el caballito de batalla de otro de los cruces del que participarán Leonardo Oyola y Natalia Mardero (Uruguay). También estarán Pola Oloixarac y Ramiro Sanchiz (Uruguay). En Eloísa Cartonera se realizará una feria del libro con ejemplares de Mansalva, Tamarisco y Garrincha; y las uruguayas Hum, Interrupciones y La Propia Cartonera. El cierre –anticipan y prometen– será con una bailanta. El tercer encuentro está previsto hacia fines de mayo en Maldonado (Uruguay).

“Ya te conté” recibió el Premio 2012 de los Fondos Concursables del Ministerio de Educación y Cultura del Uruguay, que se crearon en 2005 de la mano de Tabaré Vázquez, un programa del Frente Amplio para invertir en cultura. Uno de los obstáculos que enfrenta esta iniciativa es contrarrestar la dificultad de acceso a la información.

“La idea es desestructurar el campo y lograr que los autores se lean entre sí y que los lectores los lean. Trazamos una lista de autores, de periodistas, de medios importantes que aparecieron en los años ’90 hasta ahora, sólo en narrativa. La poesía y el teatro en Uruguay tiene otros canales, en cambio la narrativa estaba sin nadie que la moviera –explica Lucía–. Empezamos a ir a los archivos y eso se muestra en la sección ‘Rescate’ de nuestro blog. Es un proyecto de investigación y de articulación en la medida en que busca reunir a todos los escritores que empezaron a publicar en los ’90 para que se lean entre ellos, que se conozcan.” Las otras dos secciones del blog son “Pan caliente”, artículos creados para la ocasión, y “Entrevistas”. “Pensamos en un lector no especializado –aclara Débora–. No queremos al estudiante de Letras como público. Hacemos un esfuerzo enorme cuando nos llega un artículo para tratar de que la cosa se entienda.” El blog presenta una especie de gran bonus track: una biblioteca virtual con relatos inéditos cedidos por los autores para compartir con los lectores. Si tuvieran que resumir el espíritu de este colectivo, Lucía y Débora no vacilan ni un instante: “La literatura es una fiesta”.