Un amanecer con cañonazos despertará mañana a los cataqueros, gentilicio de los oriundos de Aracataca, norte de Colombia, para recordar que su hijo más ilustre, Gabriel García Márquez, cumple 80 años. “Será una alborada con pólvora, un día de jolgorio”, anunció Rafael Jiménez, director de la Fundación Casa-Museo de García Márquez en Aracataca. También habrá desfiles en los colegios locales, un tedéum en el templo principal, “papayeras” (bandas típicas de música caribeña) e incluso mariachis. Como no podía ser de otra manera, se celebrará un encuentro de escritores cataqueros en el auditorio de la Casa-Museo.

También mañana, pero a más de 800 kilómetros al sur, en Bogotá, la ministra de Cultura, Elvira Cuervo de Jaramillo, anunciará los aportes gubernamentales para reparar la casa del abuelo de Gabo, el coronel Nicolás Márquez, donde el que luego sería Premio Nobel de Literatura pasó sus primeros ocho años de vida. Su primer hogar fue declarado “monumento nacional” por el gobierno colombiano. Entre otros actos de cumpleaños, en su pueblo natal, se hará una exposición pictórica, una presentación teatral del monólogo Diatriba de amor contra un hombre sentado, con la actriz Laura García, y un concurso de murales alusivos a la vida y obra del novelista. Mañana, tras los “ochenta cañonazos”, se oficiará una “misa de acción de gracias” y posteriormente habrá un desfile militar y un concierto con Los Niños del Vallenato. El único ausente será el propio García Márquez, por problemas de salud.