Pareció, en principio, un gesto corporativo, pero en realidad sonó muy sincero. El actor estadounidense Viggo Mortensen vino a la Argentina para participar por primera vez en una película nacional, pero la coyuntura lo impulsó a decir que admira “muchísimo” al cineasta danés Lars Von Trier, al que también calificó como “un artista único y una persona con un talento inmenso”. Pero aclaró para algún despistado lo siguiente: “No me cae nada simpático ni Hitler ni su legado de cruel intolerancia. Pero mando un saludo al amigo y que se componga y que ruede muchas películas lindas”. Las palabras de Mortensen en el comienzo de su conferencia fueron casi una manera de evitar que la rueda de prensa tomara otro rumbo que el previsto: el anuncio del inminente comienzo del rodaje de Todos tenemos un plan, ópera prima de Ana Piterbarg, en la que el protagonista de El señor de los anillos encabezará el elenco junto a Soledad Villamil. También actuarán Daniel Fanego, Sofía Gala y el español Javier Godino (que interpretó a Isidoro Gómez en El secreto de sus ojos).

El film se rodará principalmente en el Delta del Tigre y tratará sobre la historia de un hombre que, tras la muerte de su hermano gemelo, decide comenzar una nueva vida adoptando la identidad del fallecido. Regresará, entonces, a la isla donde vivieron desde pequeños. Pero no resultará fácil la decisión, ya que se encontrará con un mundo criminal del que su hermano formaba parte. “Me siento muy honrado y muy contento de estar acá con este equipo”, señaló Mortensen, caracterizado por ser un hombre muy sencillo que no se vio enceguecido por las luces del estrellato. “Hace varios años que veníamos hablando con Ana de esto. Yo le dije que si podíamos, la íbamos a hacer. Las cosas fueron cambiando, estuvo a punto de hacerse, no se hizo... Es así el cine, especialmente el independiente: cuesta llevarlo adelante y contar un cuento como éste tan especial”, agregó el hincha de San Lorenzo más famoso del mundo.

Mortensen dijo que siempre se siente nervioso antes del rodaje de un film, pero que en este caso es diferente, porque este largometraje “es un producto de esta casa, Argentina, que también ha sido mi casa y la siento como tal todavía, ya que me crié acá pero nunca rodé”. A la hora de elegir su participación en una película, espera “aprender algo”. Y confesó que las películas que más le gustan “son las que no tienen un final definitivo”. Además, adelantó que interpretará el papel de los dos hermanos “que son, a la vez, parecidos y muy distintos”. El actor afirmó que “con la pérdida de la fuerza física y mental es posible perder cosas que teníamos de nuestra infancia, como la inocencia y el optimismo. Y después es cuestión de cómo se recupera o si se quiere recuperar ese optimismo. Hasta cierto punto, de eso se trata este cuento”.

Soledad Villamil, en tanto, expresó que “si algo tiene de extraordinario este trabajo es que, por un lado, te puedan ocurrir cosas como ésta: primero que te llamen para hacer una película. Segundo, que te acerquen un guión donde hay un personaje que te convoca. Y luego también que te digan: ‘El protagonista es Viggo Mortensen’”. Pero la actriz argumentó que es todavía más extraordinario “que uno se encuentra a trabajar y cuando alguien es de la calidad actoral y humana de Viggo, ese que era un nombre, es un compañero de trabajo. Y eso es algo increíble. Quizás es difícil de explicar o de entender en el imaginario del público o del periodismo cómo es ese mecanismo por el que alguien que es una estrella del cine mundial como Viggo pase a ser un compañero de trabajo, con quien hay que construir una historia, encontrarse, trabajar, ensayar”.

Piterbarg comentó que comenzó con la historia hace muchos años. “Cuando empecé a escribir no había pensado del todo en el Delta, pero sí en un lugar que tuviera río. Y gracias a un amigo que me lo recordó (yo iba de chica al Delta) volví a ir e hice una investigación para escribir”, afirmó. Y confesó que con Mortensen “venimos hablando desde hace mucho sobre el guión y viendo sus distintas versiones, que son muchísimas”. Desde hace un mes están ensayando y el actor estadounidense la acompaña en las visitas a las locaciones del Tigre. “Eso va construyendo la película”, consideró la directora, que anunció que el rodaje comenzará el 6 de junio y durará siete semanas. También informó que el ochenta por ciento de Todos tenemos un plan transcurre en el Tigre. Y que las últimas dos semanas de rodaje serán en España. El film está coproducido por Haddock Films (la coproductora de El secreto de sus ojos y de Las viudas de los jueves), las españolas Tornasol Films y Castafiore Films, en asociación con Telefe. La productora argentina Vanessa Ragone agregó que el presupuesto de este largometraje asciende a 3.500.000 de dólares.