La flamante presidenta del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), Lucrecia Cardoso, tuvo ayer por la tarde una de sus primeras actividades públicas, cuando convocó a una reunión con la prensa en el microcine del instituto para presentar públicamente la delegación de cineastas que viajará a participar del Festival de Berlín, que se celebrará en la capital de Alemania del 6 al 16 de febrero. Cardoso estuvo acompañada por los cuatro realizadores, cuyos largometrajes fueron seleccionados para la Berlinale. Dos de ellos integran la Competencia Oficial: Historia del miedo, ópera prima de Benjamín Naishtat, y la cuarta película de Celina Murga, La tercera orilla, que cuenta con producción ejecutiva de un peso pesado del cine mundial: Martin Scorsese. En la sección Generation, en tanto, participan Atlántida, de la directora cordobesa Inés María Barrionuevo, y Ciencias naturales, de Matías Lucchesi.

La presidenta del Incaa fue la encargada de romper el hielo en la reunión: “Arrancamos 2014 con un montón de buenas noticias, con una presencia del cine argentino en festivales que es inédita, como es el caso de Berlín ya que, por primera vez desde que se creó este festival, tenemos dos películas en competencia oficial”, comentó Cardoso, luego de que se exhibiera un corto con las presencias de cine nacional en muestras internacionales como Sundance (concluida el 26 de este mes), Rotterdam, la Semana de Cine Fantástico y de Terror Argentino en Madrid, y el Festival Internacional del Cortometraje de Clermont-Ferrand. “Queremos poner en valor eso porque habla de los talentos que existen en nuestro país, de nuestras historias, de esa pasión por contarlas. Y también habla de una política de Estado, una cantidad de políticas del gobierno nacional que se vienen llevando adelante para democratizar la comunicación dentro de las cuales está el fomento a la industria cinematográfica, pero también el impulso a los contenidos para las nuevas pantallas, como la TDA, la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y otras políticas que se vienen llevando adelante mancomunadamente con un montón de áreas del gobierno nacional que promueven al sector”, agregó Cardoso.

La titular del Incaa hizo uso de una metáfora para graficar la importancia de estas presencias argentinas en los festivales extranjeros: “Son las primeras estaciones de este tren que viene trayendo este 2014 con muy buenas noticias”, expresó.

Si bien para Cardoso las cuatro producciones nacionales que participan en Berlín son igual de importantes, resaltó que “el caso de Atlántida es muy importante para nosotros, porque es una película ganadora del concurso Raymundo Gleyzer del año 2009, un concurso para desarrollo de proyectos de realizadores de todas las provincias que, al igual que otros concursos, divide al país por región”.

“Hace muchos años que me viene acompañando este proyecto y siento que la película llega acá por un acompañamiento muy grande”, expresó la realizadora Inés Barrionuevo, en señal de agradecimiento. Murga decidió sumarse a las palabras anteriores de Cardoso porque la directora de La tercera orilla –entrerriana ella– fue tutora de las últimas dos ediciones del concurso Raymundo Gleyzer, al que definió como “un programa increíble que lo hemos visto crecer y está buenísimo que esté dando estos frutos también”. Murga confesó que lo ha visto “de adentro y ya el fruto en el trabajo concreto es alucinante. Está bueno que eso pueda trascender”.

Página/12 consultó a los realizadores si creen que la selección para la Berlinale les puede ayudar a generar una proyección internacional a sus largometrajes. Murga consideró que sí: “Es una ventana al mundo. Es uno de los festivales de cine más importantes de este momento, y en el caso de la Competencia Oficial, hay una atención mayor de los medios y de la gente que hace cine en particular”. En eso coincidió Benjamín Naishtat, quien señaló que, en su caso particular, “fue una gran sorpresa ir a la competencia, con lo cual el tipo de visibilidad que vamos a tener es de arriba, por decirlo de alguna manera, y estamos más que contentos”. Barrionuevo estuvo de acuerdo con sus colegas y agregó que al ser de Córdoba “la tarea es doble, porque primero hay que salir de Córdoba a Buenos Aires, y después de Buenos Aires al mundo; un poco hay que pasar por acá para ir afuera”. Aunque aclaró que “eso está cambiando y se puede ir de Córdoba al mundo. En ese sentido, el Festival de Berlín ayuda muchísimo a que haya muchas miradas”. Matías Lucchesi completó señalando que “es bueno destacar que las dos películas que van a Generation fueron filmadas con equipo técnico cordobés y en Córdoba. Eso quiere decir que Córdoba es un ejemplo de que se está moviendo bastante y la calidad técnica es alta”.

Una vez finalizada la conferencia, Página/12 dialogó unos minutos con Cardoso acerca de si siente como un reconocimiento a su labor que haya sido designada por el gobierno nacional como la nueva presidenta del Incaa, cuando previamente sonaban varios nombres. “Yo creo que es un reconocimiento a todo el equipo de trabajo que viene al frente del instituto en estos años”, opinó Cardoso. En ese sentido, “tiene que ver con la profundización de algunas políticas vinculadas a la industria cinematográfica, a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, a todas las formas nuevas y canales de fomento a la producción que se abren, a la federalización de la producción”, completó. Y por todo lo expuesto, entiende que se trata de “un reconocimiento colectivo y no individual”.