Hormigas organizadas y tecnificadas se abocan a la tarea de producir vino: la imagen de María Victoria Caruso es uno de los trabajos ganadores del concurso “El vino, un trabajo de hormigas”, para jóvenes humoristas gráficos que organizó la bodega ítalo-argentina Altos Las Hormigas y que tuvo entre los miembros del jurado a Miguel Rep y Hermenegildo Sábat. De entre los cien dibujos presentados, los de la mendocina Caruso (con predominio de colores pastel, ver detalle abajo) y del rosarino Marcelo Benítez (más austero, pero no menos entrador) compartieron el primer puesto. El segundo premio quedó para las hormigas con pies ortopédicos del bonaerense José Ballarati. Además, otras quince producciones fueron destacadas con una mención.

Antonio Morescalchi, vicepresidente de la empresa y tercer jurado del concurso, aseguró en la presentación realizada ayer en el Museo Evita que el concurso permitía “vincular dos talentos argentinos: el vino y el humor gráfico” y “establecer un puente entre dos mundos de comunicación”. Rep aprovechó la oportunidad para comparar al vino con la historia del arte: “Hay un montón de categorías incomprensibles”, dijo. “El humorista debe desorganizar ese saber, bajarle los humos”, aseguró ante la mirada atenta de los asistentes. “Es que el mundo del vino es un misterio, es todo un conocimiento complejo muy aristocrático y alejado del humor... yo no sé un pomo de vino”, remató.

“Me pregunté ‘¿cómo hacen las hormigas para fabricar vino?’ y así surgió la idea”, explicó con timidez Caruso, única ganadora proveniente de una provincia con tradición vitivinícola. A su lado, un Benítez mucho más locuaz explicaba que su búsqueda había sido la de un mensaje instantáneo, que llegara “inmediatamente al que mira”. Rep destacó que la mayoría de los trabajos que no llegaron a la instancia final eran caricaturizaciones de la borrachera y “muy lineales con la propuesta del título”. Entre las menciones se aprecia una gama de estilos amplia, con distintas técnicas y propuestas estéticas diferentes.

“¡A mí me gusta mucho el vino!”: la frase de José Ballarati fue tan espontánea que arrancó las risas de los asistentes a la ceremonia. Luego explicaría que, además de dibujante, es cocinero, y que mantiene con el vino “una relación amistosa, más que intelectual”. Su inspiración para el dibujo que le valió el segundo premio vino de la idea de las hormigas: “Me devolvió a lo más primitivo, lo más original del hacer vino”, señaló, para ejemplificar su tonel lleno de uvas y el pequeño insecto con un enorme pie ortopédico.

Los trabajos serán publicados en un catálogo que la bodega distribuirá en el ambiente especializado local, en la página web de la empresa y eventos internacionales, pero no en publicidad tradicional a gran escala. “Es que somos underground”, explicó a Página/12 Morescalchi. A sus espaldas se exponían dos de los trabajos que habían recibido menciones: uno parodiando la famosa foto de los soldados norteamericanos en Iwo Jima y otro con una referencia implícita a The Ant and the Aardvark, el dibujo animado sobre una hormiga y un oso hormiguero azul que se emitía junto a los capítulos de La Pantera Rosa. El concurso se repetirá a fines de este año, pero esta vez con una convocatoria latinoamericana.

Informe: Andrés Valenzuela.