Andrea Bocelli se convirtió rápidamente en una estrella romántica-pop, circunstancia que lo obligó a reincidir en su compromiso amoroso. Su flamante cd se llama precisamente Amor, aunque no le alcanzó con su voz para demostrar todo lo que quiere a su público; convocó entonces a tres artistas que colaboraron en el disco y provocaron una suerte de sobredois amatoria: Christina Aguilera, Stevie Wonder y Kenny G.