8-Morbo & Mambo

Idem. Independiente / UMI

Una banda llamada así debía contener estas dosis de energía virulenta y de vuelo cósmico. Entre el afrobeat, el surf rock, el stoner, el pop psicodélico y el free rock Morbo & Mambo se pega copados viajes, a menudo provocando algún estremecimiento. Aquí el permiso de no usar voces se vuelve una marca estética indudable en una banda ideal para el trasfondo de la alegría doméstica, bolichera o viajera. Hay una zapada de media hora que revisita las vertientes musicales de la psicodelia más física bajo el halo celestial de una producción precisa. L. P.

8-Revolución de verano

Hernán Martínez y Las Estrellas. Discos Perinola

Después de la separación de Voltura, Hernán Martínez no dio un volantazo radical sino que siguió haciendo lo que mejor le sale: canciones en las que la médula radica en la melodía, pero en las que las letras no son un mero complemento. Con los norteamericanos Yo La Tengo como ejemplo, el trío que completan Héctor Zuñiga (batería) y Marcos Roca (bajo) genera un indie rock bello –con sonido acorde al género, que alejará a los oídos mainstream–, que puede abrevar en Los Beatles como en Velvet Underground y hasta salir airoso cuando arriesga con la música oriental. R. C.

8-Corazón de tierra

Acido Criollo. Independiente

Con guitarra, bajo y batería –más una voz afinada, más percusiones y vientos– este trío planta una bandera diferente para el folklore argentino y latinoamericano. Le buscan una vuelta rock que no suena forzada a la “Zamba de los mineros”, rescatan la “Zamba del lino” de Oscar Matus y el entrerriano Juan José Manauta, proponen juego de ritmos y cierta fusión jazz, avanzan en un par de temazos propios (del “Arbolito” Agustín Ronconi). Se suman invitados como Liliana Herrero y Georgina Hassan. K. M.

9-Acaso de los engranajes

Proyecto Teo Cromberg. Blue Art

El compositor Teo Cromberg, habitualmente dedicado a la música electroacústica, editó uno de los discos más interesantes y riesgosos de los últimos tiempos. El en piano y procesamientos electrónicos, junto a un cuarteto de jazz –Juan Pablo Arredondo en guitarra, Daniel Johansen en saxo soprano, Jerónimo Carmona en contrabajo y Carlo Brandán en Batería–, bucea en las posibilidades de una música tan seductora como contenida, donde los recursos se convierten en material y la sutileza y el detalle funcionan como principios rectores. D. F.