Domingo, 8 de junio de 2008 | Hoy
TELEVISION › SE ESTRENA TELL ME YOU LOVE ME, NUEVA FICCION DE HBO
La flamante serie propone un retrato de parejas con problemas íntimos abordados sin eufemismos y con imágenes de desnudos frontales, siguiendo de cerca la relación entre los sentimientos y el desempeño sexual entre las personas.
Por Emanuel Respighi
Más realista que provocativa, enfocada en mostrar las complejidades de la vida en pareja más que en sumar golpes de efecto sin sentido, la nueva serie que HBO estrena el próximo domingo a las 22, Tell me you love me (“Dime que me quieres”), explora sin censuras la intimidad de cuatro parejas con problemas sexuales. La carta de presentación de la serie no deja lugar a dudas sobre el tono transgresor de la propuesta: ya en el primer capítulo se ven como lo más común desnudos totales y masturbaciones y relaciones sexuales explícitas de personas de veinte, treinta, cuarenta y hasta de 50 años, las edades que rondan cada una de las parejas. Toda una osadía para la pacata TV estadounidense, aunque no para el tono con el que HBO acostumbra impregnar a sus series. Un programa que analiza sin tapujos la incidencia de la actividad sexual en las parejas, mostrando algo que se sabe pero que no todos admiten: que la sexualidad no está disociada de los sentimientos que movilizan a una pareja.
Tell me... no es una de esas tantas series que giran en torno del sexo y cuyas tramas no pueden ni tampoco se proponen trascender a vidas más o menos exitosas de alta actividad sexual. A diferencia de Californication, sólo por citar al exponente más reciente de esta clase de programas, en Tell me... las escenas de sexo están puestas al servicio de un guión tan ingenioso como profundo sobre las relaciones humanas en pareja. Lo que vuelve única la producción de HBO estrenada en 2007 en Estados Unidos es que el sexo, si bien cumple un papel fundamental en la trama, no está menospreciado ni sobredimensionado desde el guión: más bien se le otorga el mismo valor que a otros aspectos de la vida, valorándolo como medio no sólo de goce individual, también como garante de la buena salud de cualquier pareja.
Alejada de cualquier pretensión sentimentalista, Tell me... abre una grieta para examinar con crudeza y sin eufemismos la intimidad de tres parejas en estados vitales completamente diferentes, que por diferentes razones –pero todas vinculadas con el aspecto sexual de la relación– acuden al consejo profesional de una terapeuta matrimonial para que los asesore. Cada una con un problema diferente, las parejas, sin embargo, comparten una motivación común para hacer terapia conjunta: los conflictos nacen y mueren en las sábanas de sus camas. La pregunta que rodea cada uno de los diez capítulos de la serie es qué sucede con una pareja cuando la crisis por la que atraviesa es de carácter sexual. ¿Puede el sexo derivar en el fin del amor? ¿Es posible que cierta insatisfacción en el acto sexual desemboque en odio?
Las respuestas a esas preguntas serán respondidas por Tell me... con mayor o menor grado de certeza a través de las cuatro historias (las tres parejas pacientes y la propia pareja de la doctora May Foster) que le dan vida a una trama de una candidez poco usual para la pantalla chica. Por un lado, los veinteañeros Jamie y Hugo, a punto de contraer matrimonio, se dan cuenta de que su relación puede romperse en cualquier momento, al tomar conciencia de que tienen serias diferencias con respecto a la fidelidad y el compromiso. Y lo que es peor: el único diálogo que tienen es el sexual, por lo que para ellos todo encuentra su “solución” en la cama. La distancia que comienzan a sentir Carolyn y Palek surge, en cambio, desde el mismo momento en que al cruzar la barrera de las tres décadas esta última quiso tener un hijo. La obsesión por ser madre se acrecienta ante cada intento fallido, lo que la lleva a convertir las relaciones sexuales con su marido en un mero trámite con fechas y horas estipuladas, carente de toda pasión.
En otra etapa de sus vidas, superando ya los cuarenta, Katie y Dave son padres de dos hermosos chicos, pero tienen un pequeño gran conflicto que, por el momento, sólo afecta a Katie: no comprende por qué el amor y la devoción que sienten el uno por el otro no se ha traducido en relaciones sexuales desde hace casi un año. Y cuando “pesca” a Dave masturbándose, decide iniciar una terapia de pareja sin el consentimiento –ni tampoco la compañía– de su esposo. Por último, la cuarta pareja es la que conforman la terapeuta May y su esposo. Si bien May sabe guiar con delicadeza los destinos de cada uno de los pacientes para mejorar sus relaciones, por casa las cosas no andan todo lo bien que uno supone. Es que aunque demuestran que arañando los sesenta aún se puede mantener activa la pasión y el deseo sexual, el trabajo de ella y la vida de jubilado de él hacen que comiencen a tener diferencias irreconciliables en sus prioridades diarias.
Sin abusar de golpes de efectos y con una visión honesta sobre las relaciones de pareja, Tell me... pone a disposición de los televidentes un análisis maduro sobre los miedos, complejos y problemas que salen a la luz cuando la intimidad de las parejas deja de ser un lugar de encuentro de coincidencias para pasar a convertirse en un problema más que se suma a la rutina cotidiana. Como el amor y el sexo no siempre van de la mano, Tell me... casi opera como una sesión terapéutica televisiva para ver de a dos. No sin una cuota de riesgo por un resultado tan incierto como antagónico: o a los pies de la cama o en las puertas de un problema.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.