Lunes, 19 de diciembre de 2011 | Hoy
TELEVISION › ESTA NOCHE ARRANCA EL PARAíSO, POR CANAL 7
Compuesta por trece capítulos, la ficción protagonizada por Alejandro Awada y Agustina Cherri muestra el funcionamiento de un equipo médico de guardia en un centro de atención primaria bonaerense. Medicina y problemática social se entremezclan con verosimilitud.
Por Emanuel Respighi
Existen tantos paraísos como personas en el mundo. Al fin y al cabo, el edén toma la forma de quien lo imagina. No existen dos paraísos, terrenales o imaginarios, iguales. De la misma manera, también puede pensarse que lo que algunos denominan el infierno puede no serlo para otros. En todo caso, la inquietud pasa por saber si un lugar “infernal” puede transformarse en un “paraíso” para quienes transitan por allí. ¿Cuáles son los límites entre uno y otro? ¿Qué es lo que vuelve algo paradisíaco o infernal? ¿Son los seres humanos rehenes de sus circunstancias? Algunos de estos interrogantes subyacen en la trama de El paraíso, la ficción que esta noche a las 22.30 estrena Canal 7. Compuesta por trece capítulos, que se emitirán diariamente de lunes a viernes, El paraíso narra el funcionamiento de un equipo médico de guardia en un Centro de Atención Primaria bonaerense, donde los casos médicos, las problemáticas sociales y las vidas de los protagonistas se combinan con inusual verosimilitud.
Protagonizada por Alejandro Awada y Agustina Cherri, El paraíso crea una expectativa que trasciende, incluso, a su trama. Es que su estreno marca la presentación oficial en TV de una de las series seleccionadas en los concursos del Banco Audiovisual de Contenidos Universales Argentinos de la TV Digital (Bacua), que hasta el momento no habían conseguido difusión abierta. De esta manera, la ficción dirigida por Sabrina Farji (directora de Eva y Lola y Cielo azul, cielo negro, entre otros films) es la primera en ver la luz del programa para la promoción de la producción de contenidos audiovisuales digitales de los que se abastece el Bacua.
La serie cuenta la vida de Carlos Azahar (Awada), un médico prestigioso de Capital Federal, que de un momento al otro se separa de su segunda mujer y debe conseguir un trabajo extra a las apuradas para poder sobrevivir. Con esa urgencia, acepta tomar una guardia en “El paraíso”, una sala de atención primaria en el conurbano bonaerense, una zona llena de contrastes y carencias. Azahar tomará contacto con otros profesionales de la salud, como Laura (Cherri), la enfermera; Norma (Graciela Stefani), la partera, y Pablo (Mariano Torre), el chofer de la ambulancia. Todos seres capacitados para salvar vidas, con la paradoja de que, sin embargo, pareciera que les faltan herramientas para poder salvar las propias.
“Me interesa mostrar los contrastes y las contradicciones, y ese juego se desparrama ya desde el titulo porque el lugar se llama ‘El Paraíso’ pero es un infierno, aunque en ese lugar logren encontrar ‘su’ paraíso”, le explica a Página/12 la guionista y realizadora. “La tensión y distensión de una guardia, la diferencia entre lo importante y urgente. El contraste es social, pero también emocional. A mí me gusta contar que los límites no son tan claros. Se corren todo el tiempo y son absolutamente relativos. En este primer concurso de contenidos pensé que sería oportuno ‘usar’ la posibilidad de instalar desde la ficción las temáticas orientadas a la salud, haciendo foco en la juventud, en las adicciones, los embarazos precoces, la violencia familiar y otros temas ligados al desarrollo social. Quería mostrar cómo en una comunidad donde hay situaciones más precarias, así como hay necesidad y violencia, también hay solidaridad, familia y ganas de tener una vida mejor”, subraya.
El paraíso transita por la historia del grupo de profesionales alrededor de la guardia sin caer en estigmatizaciones ni prejuicios. En este aspecto, la serie contó con la ventaja de que una de sus guionistas, Romina Rissolo, es médica pediatra que acercó no sólo su experiencia sino también historias reales en las que se basaron cada uno de los capítulos. “Ella estuvo en el rodaje –cuenta Farji–, cuidando que todos los procedimientos médicos fueran correctos. Los actores asistieron a un centro de salud para aprender a manipular las herramientas propias de este trabajo, como la aplicación de suero, de inyecciones; aprendieron los puntos desde donde escuchar la respiración con el estetoscopio. Era gracioso ver a Awada y Cherri poniendo y sacándose el estetoscopio. Creo que el verosímil está cuidado. No es real pero tiene que parecerlo.”
Al consultarle a la realizadora y guionista sobre los aspectos distintivos de El paraíso, Farji detalla algunas particularidades que tiene la serie en relación con programas estadounidenses como ER o Grey’s anathomy, o ciclos locales como Hospital público o Los médicos de hoy. “En la Argentina –señala– siempre se tomó al hospital como un decorado de fondo, donde lo importante era la historia de amor pero nunca era el contexto real desde donde se dispara la trama. En El paraíso el conflicto está por ocurrir donde ocurre. Hay un realismo verosímil que sí está conectado con otras series, con historias basadas en la realidad y actores que transitan cómodamente como si ‘fueran médicos de toda la vida’. El tono es otra de las cosas diferentes con las series americanas, porque el humor argentino se cuela en todas las escenas”.
Por último, Farji celebra que desde el Estado se promocionen y se financien contenidos audiovisuales. “En estos concursos hay voluntad política de abrir los espacios a otros realizadores, de dar trabajo a más gente y que existan otras voces. Para romper con los monopolios también desde las imágenes y las historias que se cuentan. Hicimos la serie con un presupuesto acotado pero que de entrada sabíamos cuál era. Eso agudizó nuestra capacidad productora y la creatividad para poder llevarlo adelante. Armamos un diseño de producción posible. Tuvimos libertad total con los guiones. Hicimos la serie que figuraba en la carpeta de presentación del proyecto. Las limitaciones fueron las de tiempo y dinero, porque había un presupuesto fijo y un tiempo de entrega. Desde el otro lado siempre hubo ‘escucha’ y además los sindicatos comprendieron que se necesitaban nuevas regulaciones. O sea que esto trajo que toda la industria se corriera de los límites y todos pusieron su granito de arena para llevarlo adelante. Nosotros sentimos una mística especial, de los primeros tiempos de algo y como que también había que cuidar lo que habíamos conseguido. Para que haya otros concursos. Para que sean prestigiosos. En todas las situaciones de estrés que tuvimos en el rodaje siempre prevaleció la alegría de ser parte de un momento histórico e inédito en la producción de TV.”
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.