7

JANE EYRE

de Cary Joji Fukunaga. Con Mia Wasikowska, Michael Fassbender y Jamie Bell. 2011, 120 min. AVH.

Esta enésima versión de la trajinada novela de Charlotte Brontë prueba que se le puede dar nueva vida a un clásico, sin necesidad de encontrarle ninguna otra vuelta que no sea la de la fidelidad total. Lo cual no tiene por qué ser sinónimo –como lo es, en nueve de cada diez casos– de mediocridad, pesadez, academicismo o retrogradismo. La clave es estar convencido, como aquí el realizador Cary Joji Fukunaga, de que lo que les pasa a estos personajes –que visten ropas imposibles y se expresan con una cortesía como de otro mundo– es en el fondo lo mismo que le puede suceder, hoy en día, a cualquier hijo de vecino. Pero llevado al extremo. Que para eso están las novelas. Las novelas clásicas, al menos.

4

SIEMPRE EL MISMO DIA

de Lone Scherfig. Con Anne Hathaway, Jim Sturgess y Patricia Clarkson. 2011, 107 min. AVH.

Tan británica como Jane Eyre, esta ¿comedia romántica? es su más perfecto opuesto. No hay en ella la más mínima verdad. Empezando por la artificialísima fórmula que la anima: narrar la ¿relación? entre un representante masculino y una femenina de la ¿especie humana?, desde el college hasta la treintena. Pero siempre en el mismo día, el 15 de julio, Anne Hathaway hace de aspirante a escritora, mientras que su contraparte es una figura mediática llena de éxito, dinero y mujeres. Pero frustrado, porque no se encuentra a sí mismo, el pobre. Ambos se pasan toda la película amagando y casi sin darse un maldito beso, como esos jugadores a los que da en llamarse “calesiteros”.