7-Elefante blanco,

de Pablo Trapero. Con Ricardo Darín, Jérémie Renier y Martina Gusman.

2012, 106 min. Disney Argentina.

Pablo Trapero y los guionistas de sus películas más recientes (Alejandro Fadel, Santiago Mitre y Martín Mauregui) abordan un ámbito complicado, el de las villas de emergencia, evitando estereotipos y estigmatizaciones, tanto como facilismos demagógicos. Los protagonistas –dos sacerdotes populares y una asistente social– ponen el hombro, pero llenos de dudas, ganas de dar un paso al costado, crisis de fe y hasta comportamientos que la Iglesia condena. Como de costumbre, Trapero hace ingresar al espectador medio a un mundo que no es el de su experiencia cotidiana. Elefante blanco abre el tema del asistencialismo a toda clase de posibles discusiones, aunque el enfoque semidocumental tiende a chocar con el formato de gran espectáculo.

6-Los juegos del hambre,

de Gary Ross. Con Jennifer Lawrence, Josh Hutcherson y Woody Harrelson.

2012, 142 min. AVH.

Primera entrega de una nueva saga basada en una serie de libros superpopulares en los Estados Unidos, Los juegos del hambre representa un notable salto adelante, en términos de audacia y provocatividad, con respecto a las series Harry Potter y Crepúsculo. En un mundo alternativo, todos los años se celebran unos juegos de supervivencia, protagonizados por adolescentes a los que el Estado obliga a participar. Los juegos son a muerte y terminan con un único sobreviviente. Más allá de su condición de plagio evidente del film japonés Battle Royale y de que a la hora de la crueldad la película se autocensura, la crítica implícita a los medios y, sobre todo, a los realities, hace de Los juegos del hambre un film atendible.