8-CAPTURANDO A LOS FRIEDMAN,

de A. Jare-cki. Con Arnold Friedman, Elaine Friedman y David Friedman.

2003, 107 min. Gativideo/Colección 791.

Un documental que no dejará a nadie indiferente. Pero no por bombardear demagógicamente al espectador, al estilo Michael Moore, sino más bien por enfrentarlo con la ambigüedad de los hechos. El espectador de Capturando a los Friedman es como un jurado que no tiene pruebas suficientes para poder dictaminar si el acusado es inocente o culpable. El acusado es Arnold Friedman, padre de familia intachable a quien un día se le secuestra pornografía infantil y poco más tarde se lo acusa de innumerables abusos sexuales cometidos contra sus alumnos particulares. Utilizando videos caseros filmados a lo largo de los años por los propios Friedman, la película de Andrew Jarecki es una verdadera radiografía de la desintegración familiar.

8-EL SABOR DEL TE,

de Katsuhito Ishii. Con Maya Banno, Takahiro Sato y Tadanobu Asano.

2004, 144 min. Gativideo/Colección 791.

Otra de disfuncionalidad familiar. Pero en este caso no se trata de seres bajo sospecha, sino de una colección de simpáticos excéntricos nipones. Empezando por el abuelo, que practica raros pasos de danza, y llegando hasta la nieta menor, que imagina una versión gigante de sí misma, que la espía. Otros integrantes de este clan campesino –suerte de Katakuris en versión naïf– son el papá (odontólogo hipnotista), la mamá (dibujante de mangas) y el hermano mayor, capaz de convertirse en experto jugador de go con tal de conquistar a la chica de sus sueños. Conocido en Occidente como autor del animé de Kill Bill Vol. 1, lo de Katsuhito Ishii no se agota en el mero esoterismo cool. Se abre por el contrario al lirismo, lo inesperado y, cómo no, a la más genuina emoción.

7-EL NUEVO MUNDO,

de Terrence Malick. Con Colin Farrell, Q’Orianka Kilcher y Christian Bale.

2005, 135 min. AVH.

Honda y grandilocuente, lírica y fallida, sublime en más de un momento y casi infantil en otros, la hiperambiciosa ópera pastoril de Terrence Malick parece una catedral construida sobre terreno arcilloso. Al recrear la historia de Pocahontas y el capitán Smith, el autor de La delgada línea roja aspira a narrar el mito de origen, la escena primaria de lo que más tarde serían los Estados Unidos. El problema es que la elevación de la forma (largos y extáticos planos secuencia, ralentis, escenas que parecen flotar) no se corresponde con la banalidad de una love story que para el propio realizador da la impresión de representar un trámite que hay que atravesar. Eso sí, hay hipnosis garantizada para quien se deje arrastrar por la steadycam, liviana como una pluma.

7-ABC DE AMOR,

de Mark Levin. Con Josh Hutcherson y Charlie Ray.

2005, 92 min. Gativideo.

Típica tapada, esta historia de amor entre dos chicos es una de esas películas que se descartan de un manotazo cuando se lee lo que dice en la contratapa. Pero quien haga el intento de verla se verá recompensado. Tratar a los chicos como seres humanos, concederles el goce de la inteligencia y tomar de ellos el gusto por lo lúdico y el humor son algunos de los méritos de la guionista Jenniffer Flackett y el director, Mark Levin. “Yo debería despreciarla, no estar todo cohibido”, afirma Gabe en el chisporroteante off de Little Manhattan, apropiadísimo título original, justo antes de admitir que se enamoró perdidamente de Rosemary. Llena de hallazgos, esta pequeña gema no elude la corrosión: es imperdible el relato que hace el chico de la separación de sus padres.