Si se habla de cine comprometido con la realidad, Pino Solanas es referencia obligada. Desde luego, las opiniones contra el Gobierno que ha expresado recientemente el líder del Proyecto Sur, sumadas al hecho de que su compañero Claudio Lozano votara en contra de la 125, le han añadido una pátina polémica adicional a sus intervenciones. Pátina que, sin embargo, no representa para los entrevistados un obstáculo insalvable. “Es uno de nuestros maestros. Le mandé un mail a Pino invitándolo al estreno y expresándole que nos unificaban mucho más las coincidencias estratégicas y la pasión por el cine que las diferencias tácticas. El tuvo la amabilidad de responderme y coincidió, así que seguramente nos vamos a encontrar”, revela Blaustein. Puntualiza, además, que aunque a veces levanta temperatura al escuchar las opiniones del director de La Hora de los Hornos, le reconoce el ser “un apasionado del cine, que aún hoy se levanta a las cinco de la mañana para viajar a cualquier parte a discutir con los espectadores”. “Cada vez que él estrena algo, yo tiemblo de emoción”, sintetiza.

Daicich aclara posiciones desde otro cristal: “Lo que pasa es que este documental trabaja en un plano más macro que el de la opinión política puntual. A treinta años de haber recuperado la democracia, ¿cómo hacemos para que no termine convertida en ir a votar cada dos o cuatro años en un domingo de sol? De eso se trata, y no de tomar partido a favor o en contra de una gestión”. “Uno de los grandes problemas con los que lidiamos desde la asunción de Alfonsín es que el que gobierna trata de gestionar y la oposición consiste en boicotear. Nosotros tratamos de mostrar que hay partes de verdad en cada uno de los sectores que consultamos, destacando que la clave está en descubrir por dónde pasa el bien común”, completa.