¿Imposta o no imposta? “He sido mentiroso durante mucho tiempo”, confiesa Bossi. Su amigo Diego Tarditi, que lo acompaña a todas partes, asiente: “Uf. Este venía al bar y nos saludaba ‘hola, hoy estoy bárbaro’. Entonces le decíamos ‘vas a salir por esa puerta, vas a volver a entrar y nos vas a decir la verdad’”. En el álbum de recuerdos, los amigos guardan memorias de una época itinerante y pobre. “Una vez habíamos ido a Pinamar y no tenía dónde presentarme. Tarditi me dijo: ‘Esperate que arreglo algo’.” Como a las dos horas, se escuchó un camión haciendo publicidad a través de una propaladora. “Invitaban a un recital de Fito Páez y me dije ‘Zas, Diego los convenció para que me contraten y les haga a Fito... ¡pero cuando se den cuenta de que no soy el real nos van a matar a todos!”. Se juntó una multitud tratando de conseguir entradas, la televisión anunció la noticia. Encima, teníamos un vestuarista heroinómano que habíamos ‘contratado’ en la terminal de ómnibus”, relata el actor. “La verdad, es un milagro que estemos acá”, concluye.