La película mexicana El comienzo del tiempo, dirigida por Bernardo Arellano, ganó ayer el premio mayor de la quinta edición del Beijing International Film Festival, al mejor film de la competencia oficial. El jurado presidido por el realizador y productor francés Luc Besson le entregó a la delegación mexicana el premio denominado Tiantan (Templo del Cielo), en una fastuosa ceremonia en un centro de convenciones en las afueras de la capital china. El segundo largometraje de Arellano narra la vida cotidiana de un matrimonio de ancianos que rondan los 90 años y que deben volver a trabajar, vendiendo tamales en la calle, ante la crisis económica que afecta al país y que suspende las jubilaciones. El film fue realizado con actores no profesionales y es extremadamente crítico no sólo con la situación política mexicana, sino también con la indiferencia de su sociedad.