CINE
La muerte de Jaime Roldós se proyecta en el marco de un Panorama Ecuador, que ocupa el auditorio del Palais de Glace durante una semana. Iniciado ayer con la proyección del largo de ficción Abuelos (2010) y el cortometraje Vicenta (2014), ambos de la realizadora Carla Valencia Dávila, el ciclo se completa el viernes 14 a las 19, con el corto Conversaciones en el jardín (sobre el jardinero del Museo Larreta, en Buenos Aires) y el largo Saudade (ambos de 2014). De producción escasa hasta fines de los años ‘90, el cine ecuatoriano experimentó, a partir de ese momento, un florecimiento semejante al que se verificó en la Argentina, desde el momento en que se sancionó la Ley de Cine (1994). Así como el cine argentino tuvo su Pizza, birra, faso, el cine ecuatoriano saltó al plano internacional con Ratas, ratones, rateros (1999), film de estética realista sobre un grupo de pibes más o menos chorros de Quito, que pudo verse al año siguiente en el Bafici. A partir de ese momento, su director, Sebastián Cordero, se convirtió en habitué de los más importantes festivales internacionales. Al mismo tiempo, el cine ecuatoriano incrementaba su producción cinematográfica en progresión geométrica, proceso que se vio intensificado desde la asunción de Rafael Correa.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux