Inspirada en hechos reales, la traslación al teatro del libro que aborda el amor y la muerte, los dos grandes temas de la existencia humana, cuenta con las actuaciones de Rolón, Alejo García Pintos y Carlos Nieto, que también la dirige. Esta segunda temporada, el personaje principal de Majo es interpretado por Malena Rolón, la hija del psicoanlista. “Ella sabía la letra de memoria dos años antes de ponernos a ensayar, quería hacer ese papel y lo venía estudiando para demostrarme que podía, pero yo sentía que todavía no estaba preparada”, cuenta el autor y protagonista de la obra. “Debo admitir que la relación, al principio, fue difícil porque Malena quería este papel desde antes de estar preparada para hacerlo. Le hice saber que ella no estaba preparada, aun cuando había estudiado con Hugo Midón, Cristina Banegas, Jorge Marrale... El problema era que ella tenía 16 años. Ahora, que tiene 19, adquirió la madurez necesaria”, confiesa.

–No. Yo no quería exponerla antes de tiempo. De hecho. Probablemente, porque es mi hija tuvo que esperar más de lo que hubiese esperado cualquier otra actriz para hacer ese papel. Como papá, no quería que dijeran que estaba sobre el escenario porque era mi hija. El vínculo es muy bueno porque trato de ser un compañero más de Malena, y la escucho como una compañera más. Si algo pasa en esas charlas de camarín, jamás la expongo adelante de todos. En todo caso, le puedo hacer algún comentario como papá una vez que estamos fuera del teatro.