La teoría de Gaia y el futuro de la humanidad
James Lovelock
Editorial Planeta, 264 págs.

Como ocurre en todo libro, la solapa pegada a la tapa es la entrada al mundo biográfico del autor, una escueta (y a veces inflada) respuesta a las preguntas básicas –quién, qué y de dónde– que despiertan un nombre conocido pero al mismo tiempo extraño. En La venganza de la Tierra: la teoría de Gaia y el futuro de la humanidad de James Lovelock sirve también de eso: “autor de más de doscientos artículos científicos y el padre de la Teoría de Gaia –arremete–. Es miembro de la Royal Society desde 1974. Ha sido calificado como ’uno de los grandes pensadores de nuestra época’ (New Scientist), ’una de las figuras más influyentes del movimiento ecologista’ (Observer) o ’uno de los cien intelectuales más importantes del mundo’”.

Dato más, dato menos, lo cierto es que Lovelock es el forjador de una de las metáforas más ambiciosas en la historia de la ciencia, tanto que por sus implicancias y connotaciones fue recibida y adoptada con gran júbilo por el movimiento New Age de la década del setenta hasta orillar la categoría de religión. Metáfora de la Tierra viva, la “teoría de Gaia” vio la luz en 1972 y después de un raid de más de 30 años de burlas, críticas y despotriques varios aún hoy se la ve con cierta dejadez y sospecha.

Aun así, Lovelock continúa en pie con su campaña propagandística y no descansará hasta ver a su teoría –una hipótesis que imagina al planeta como el ser vivo más grande del Sistema Solar– al mismo nivel de la teoría de la relatividad y la teoría de la evolución. La venganza de la Tierra es en este contexto ni más ni menos que una actualización para las nuevas generaciones que, preocupadas por el medio ambiente y estremecidos ante su acuciante destrucción, exploran marcos teóricos e investigaciones interdisciplinarias que buscan una salida.

Como en sus anteriores intervenciones literarias, Lovelock habla como médico planetario cuyo paciente, la Tierra viva, tiene fiebre provocada sin ir muy lejos por una plaga conocida: la especie humana. Legible y claro, La venganza... se eleva por encima de los miles de libros (aburridos) sobre el medio ambiente al apelar estratégicamente a un compromiso emotivo y firme para detener de una vez por todas la (auto)aniquilación.