Pablo Capanna:
“La ciencia ficción atraviesa una crisis prolongada porque no tiene horizonte de futuro, es decir, lo más lejano que aspira a predecir es el año que viene. Y también toda esta aceleración de descubrimientos y desarrollos tecnológicos que un poco desalientan”.

Carlos Gardini:
“Yo escribo por un impulso inercial que es descubrir cosas. Para mí es muy gracioso que me digan que esto o aquello es fantasía cuando uno no sabe qué es la realidad. Lo que uno vive es en gran medida una apariencia. En eso la ciencia y la literatura fantástica se parecen: buscan desentrañar esas apariencias desde caminos muy distintos”.

Leonardo Moledo:
“La divulgación de la ciencia linda mucho la ciencia ficción porque buena parte de la ciencia es fantasía. Hasta diría que la ciencia es literatura en el sentido de que la ciencia es ciencia en tanto es contada”.

Ana María Shua:
“La literatura fantástica es literatura de lo imposible y la literatura de ciencia ficción es literatura de lo altamente improbable. (...) El trabajo de un escritor consiste en tomar elementos del caos de la realidad y construir con eso un pequeño cosmos, un mundito artificial y articulado en el que todas las piezas y engranajes funcionen y serelacionen unos con otros. Por eso el escritor es un ridículo y modesto mini dios creador”.