Por Inecip *

El miércoles de la semana pasada, diez mujeres privadas de su libertad en la Unidad 3 de Ezeiza fueron trasladadas compulsivamente a la Unidad 13 de La Pampa. El traslado –argumentado en función de una “técnica penintenciaria”– responde solamente a intereses de la administración penitenciaria, en desmedro de los derechos de las mujeres presas trasladadas, ya que en ningún momento se contempló la pérdida de los lazos familiares y sociales de las detenidas.
Tampoco se respetaron las normas procedimentales básicas de los traslados para evitar el sufrimiento físico. Sospechosamente, todas
las mujeres trasladadas habían
demandado al Servicio Penitenciario Federal. Todas ellas también eran participantes del Programa de Divulgación Jurídica, Género y
Participación Ciudadana (capacitación en sus derechos) que el Inecip lleva a cabo en la Unidad 3 desde abril de 2003.
Actualmente, las mujeres privadas de la libertad se encuentran
en huelga de hambre y exigen su reintegro a la Unidad 3. Viniendo del Servicio Penitenciario Federal, el traslado de unidad es un
mecanismo de control y sanción a las mujeres privadas de la libertad que son más aguerridas o están más desprotegidas.

* Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales.