Los aniversarios están estrechamente ligados al ejercicio de la memoria, y hoy Las12 cumple una década. Fui cariñosamente invitada a participar de dicho ejercicio, con gusto acepté participar del festejo y sin embargo, hace un par de días que doy vueltas y no logro hacerlo.

¿Cómo elegir aquel ejemplar inolvidable? ¿Qué marcaría la importancia de esa nota, de esa que yo por algún criterio individual, egoísta, tal vez absurdo, estimo memorable o fundamental?

Elegir implica priorizar, jerarquizar, excluir, establecer un orden, prescribir... es decir, toda una serie de operaciones que hacen a la tarea –fatalmente excluyente y arbitraria– de clasificar. Si además dicha elección se debe realizar dentro de un conjunto que posee un valor especial, la responsabilidad de quien elige se hace manifiesta e incomoda. Estoy incómoda, me incomoda elegir y más aún si es en soledad. ¿Por qué?

Porque Las12 es uno de nuestros archivos, un archivo público e íntimo a la vez. Allí están minuciosamente denunciadas las complejas formas en las que se manifiesta la opresión de género. Allí está el registro de las múltiples voces y formas que adquirió la resistencia a dicho orden de género; registro que en sí mismo es un resistir. Allí están valoradas formas de producción cultural que ningún canon reivindicaría. Y hasta hay reflexiones sobre el sistema de la moda que nos interpelan como interlocutoras/es, y no como corderos consumidos por el mismo. Quien decida indagar acerca de estas cuestiones, problematizarlas, historizarlas a lo largo de una década marcada por una de las peores crisis por las que atravesó nuestra sociedad, tiene en Las12 una fuente de lujo. Ese es su mayor valor público.

Las12 tiene otro valor importante como archivo colectivo, aunque más íntimo. Me animo a arriesgar que para muchas personas del activismo sociosexual es una especie de álbum fotográfico de familia. Allí están plasmados nuestros amores, nuestras afinidades y nuestros conflictos. Lazos tensados por diferencias ideológicas, generacionales, geográficas, económicas y corporales. En sus páginas leí por primera vez a varias/os de los que hoy son mis amistades mas queridas, esas que siempre están, esas a quienes espero en mi cumpleaños y entre las que como ahora no puedo elegir porque todas son necesarias.

* Integrante del grupo feminista Aji de Pollo. Coordinadora del Area Tecnologias del Genero, C.C. Rojas